La llama del Fuegoeterno

Opinión:

"La llama del Fuegoeterno" es la tercera entrega de la saga Fuegoeterno, escrita por Penn Cole.

"Fuegoeterno" está pensado para un público juvenil, de 15 años en adelante. Pero es una historia que cualquier amante de la fantasía va a disfrutar, independientemente de su edad, como ha sido mi caso.

"Fuegoeterno" es una saga, y como tal, es vital leerla en orden. La primera parte es "El despertar del Fuegoeterno", y la segunda "El resplandor del Fuegoeterno".

La edición por parte de TBR Editorial sigue la misma línea de las anteriores entregas. En tapa dura, y una edición especial con los cantos a color. En esta ocasión el color elegido en el morado, que hace juego con la ilustración de cubierta. De esta manera, los tres juntos hacen una colección muy bonita y llamativa al ser cada uno de un color pero bien conjuntados.

La edición, al igual que las anteriores, incluye además un espectacular mapa a doble página de Emarion y sus reinos. Me ha gustado mucho este detalle, ya que es una manera de que el lector se familiarice con ellos y vaya siguiendo los pasos de Diem y el resto de personajes.

Su tamaño, algo más de 1000 páginas, puede asustar en un principio, pero lo cierto es que la autora logra que el lector se adentre tanto en la historia que irás pasando las páginas sin darte cuenta... hasta que ya no hay más, y entonces desearás tener la siguiente parte, a ser posible de otras 1000 páginas, para seguir leyendo.

Penn Cole ha creado un mundo que me tiene enamorada. Es una historia de fantasía muy original, con una trama y un trasfondo de historia sobre Emarion, los reinos, los Descendientes, los Vástagos y todo lo que lo engloba que me ha fascinado. Además, la autora no abruma al lector con mucha información de golpe, con párrafos y párrafos sobre datos, sino que los va incluyendo a la par que van haciendo falta para el desarrollo de la historia. En ocasiones, es como si Diem o el resto de personajes nos lo contase, y, en otras, como si lo descubriésemos a la par que ellos. De esta manera, el lector se transforma en un personaje más y no es un mero espectador de los acontecimientos. Además, Penn Cole tiene una forma de narrar muy amena y adictiva, sabe crear tensión y que la historia sea muy dinámica en todo momento.

En "El resplandor del Fuegoeterno" dejamos a Diem justo cuando se producía el ataque a la Isla Central. Allí, para su sorpresa antes de que todo estallase por los aires, ve a su madre, la cual estaba desaparecida.

En "La llama del Fuegoeterno", cuando Diem despierta, se encuentra secuestrada por los Guardianes, y descubre que su rito de coronación no ha podido completarse.

A raíz de ello, Diem se verá en una encrucijada, quiere ayudar a los Descendientes pero también a los mortales; ambos bandos la reclaman pero también ambos bandos quieren verla muerta. Mientras intenta seguir con vida, ayudar a unos y otros y evitar el derramamiento de sangre, Diem irá descubriendo la verdad sobre su parte Descendiente y sobre su padre. Además, se adentrará en un peligroso viaje de la mano de Luther por los diferentes reinos de Emarion, mientras su historia de amor crece y se afianza.

"La llama del Fuegoeterno" es la típica historia de "enemies to lovers", pero también es mucho más: magia, aventuras, lealtad, familia, amistad, y una lucha por la igualdad... entre otros muchos detalles.

Según avanza la historia, los secretos que tanto Diem, como su madre Auralie, e incluso Luther y otros personajes han guardado van poco a poco saliendo a la luz. Algunos debido a las circunstancias; otros, como acto de confianza. Descubriremos algunos que ya intuíamos, y otros, nos sorprenderán, aunque aún quedan muchos más, como los relacionados con la identidad del padre de Diem, los Vástagos y la historia de Emarion. Lo cierto es que cuando una parte de la trama se desvela, da pie a nuevas incógnitas. Quizá esto parezca que enreda demasiado la madeja o partes de relleno o paja, pero nada más lejos de la realidad.

Las traiciones siguen muy presentes, y es que, aunque todos aseguran querer proteger su reino, en ocasiones la realidad es muy diferente. El poder y la ambición les tiene cegados, logrando escenas que ponen los pelos de punta. Quizá en muchos aspectos, Guardianes y Descendientes no sean tan diferentes.

Poco a poco, Diem va ganando confianza en sí misma y en su corona, logrando controlar su magia, y descubriendo lo fuerte que puede llegar a ser. A través de ella, veremos la importancia de aceptarse a sí misma y a sus orígenes, ya que eso no define quién es, sino sus actos. Aunque quizá la bondad que siempre quiere mostrar y la igualdad que quiere lograr para su pueblo, juegue en su contra.

Me ha gustado también cómo la relación entre Diem y Luther se va formando, y esa tensión un tanto sexual que comienza a surgir entre ellos y que parece que no van a poder resolver. El alma de ambos, su ánima sacra, como lo llama la autora, es una fiel representación de las almas gemelas, de la conexión que va más allá de lo terrenal, y el amor incondicional. Tras leer la saga de Fuegoeterno, creo que muchos lectores querrían un sentimiento tan especial como el que tienen Diem y Luther.

La autora se centra también en la lealtad y la amistad, y lo veremos reflejado en Alixe, Taran, Perthe o Zalaric, entre otros. Son personajes secundarios pero con un gran papel e imprescindibles en toda esta historia. La autora les ha creado también su propia historia personal e iremos viendo cómo van evolucionando libro tras libro.

En resumen, "La llama del Fuegoeterno" es una historia increíble en la que la autora mantiene la tensión durante toda la lectura. Literalmente, no podía dejar de leer, a cada rato que tenía libre tenía que adentrarme en sus páginas. Como guinda, su final es una bomba, lo cual no hace sino acrecentar las ganas de seguir con la historia, lo cual espero que pueda ser pronto, ya que la situación de Diem es muy peculiar y... complicada, por decirlo suavemente.

Vane Gómez