Un fantasma en la garganta

Opinión:

"Un fantasma en la garganta", de la autora irlandesa Doireann Ní Ghríofa (Galway 1981) es un libro que desde sus primeras páginas se descubre como distinto, especial. Un viaje a través de la poesía irlandesa que resulta ser en realidad la historia de una mujer en la búsqueda de la identidad y la experiencia de la maternidad, cuestionada o al menos vista en su limitación.

El motivo de partida es un poema irlandés del siglo XVIII, "Caoineadh Airt Uí Laoghaire", escrito por Eibhlín Dubh Ní Chonaill. La protagonista de la novela quedará tan fascinada por este "lamento", que desde ese instante dedicará todo el tiempo que su vida doméstica y personal le permite a conocer más sobre él. El  poema nos revela una mujer desconsolada por la muerte de su esposo y llena de furia por su asesinato, y lo mejor del libro es la forma en que se entrelaza hábilmente la realidad inmediata de la protagonista y narradora con la vida de la autora del poema. Para seguir completando la historia de la composición y la autora, tendrá que robar horas a su felicidad, a su vida, a los intereses que deberían predominar en el momento personal en que vive.

"Un fantasma en la garganta" es por tanto a un tiempo un ejercicio de erudición -se otorga una dimensión casi filológica a la búsqueda de más detalles sobre el poema- combinado con una vena imaginativa a través de la que la autora nos lleva a reflexionar sobre los límites de la biografía, las neurosis contemporáneas y la maternidad en una era postfeminista.

La prosa de Ní Ghríofa es dinámica, refulgente. Prefiere el latigazo rápido al párrafo complejo, pero sobre todo es buena ofreciendo conexiones inesperadas y despertando emociones en el lector. Las metáforas, arriesgadas, desafían conceptos tradicionales de narración e incluso la convención de lo que se ha dado a entender como autobiografía femenina. No resulta por tanto sencillo reducir el texto a una categoría literaria, aunque esté construido como una novela. A veces entra en significados profundos y otras en nimiedades, cuestiones sin más trascendencia ni recorrido.

«Este es un texto hembra», nos avisa la autora desde el primer capítulo. Lo que está claro es que Doireann Ní Ghríofa es una escritora a la que merece la pena seguir la pista, pues tiene cualidades para ofrecer una buena obra en el futuro.

Rafael Ruiz Pleguezuelos