Sálvame de los hombres peligrosos

Opinión:

"Sálvame de los hombres peligrosos" es el primer libro con el que se inicia una serie policíaca cuya protagonista es Nikki Griffin. Su autor, S. A. Lelchuk, es un escritor estadounidense de novelas policíacas que se dedica a impartir clases de escritura creativa y a realizar charlas y conferencias sobre literatura por todo el mundo.

Lo primero que quiero destacar de la novela es a su protagonista, una mujer inteligente, guapa, divertida y fascinante, pero que tiene un lado oscuro, un lado que da miedo y que sale al exterior en forma de violencia. La agresividad la dirige hacia los hombres que agreden a las mujeres. Los castiga con el "ojo por ojo y diente por diente" para que sientan las mismas cosas que ellos han hecho sentir antes a sus parejas. A juicio de la protagonista, es la única manera de que comprendan. En el transcurso de la historia, ella va dando pinceladas de su pasado que te hacen entender el porqué de ese comportamiento. Desde el principio sientes simpatía por esta mujer, pero con el avance de la novela su magnetismo aumenta y terminas viéndola como una heroína que te ha cautivado completamente.

Otro cariz interesante de la obra es la cantidad de referencias literarias que hay en ella. Nikki es una apasionada de la lectura, ha leído muchísimo y tiene una cultura literaria impresionante. La narración y los diálogos de la trama están llenos de alusiones y guiños a textos y autores que, dependiendo de con quién esté hablando, los captan, o no. A los que nos gusta leer, sabemos que un libro lleva a otro libro y nos agrada que las novelas estén llenas de menciones a otros escritos. En mi caso, acabo anotando siempre las obras que nombra y me interesan en mi libreta de lecturas pendientes.

Me gustaría compartir un detalle curioso de los muchos que se pueden atrapar en la historia. Nikki, en la librería, tiene un gato que se llama "Bartleby". Al instante te viene a la mente que el nombre es por "Bartleby, el escribiente", un cuento breve del escritor estadounidense Herman Melville. Quien conozca el relato sabe que Bartleby se caracteriza por la famosa frase de "Preferiría no hacerlo", y pensando en esta frase y en el carácter que define a los felinos... creo que mejor nombre imposible para un gato. La novela está salpicada de pormenores de este estilo que parecen insignificantes, pero observados, una se da cuenta de que no están por casualidad. Este sutil juego entre escritor y lector me resulta muy atractivo.

De la trama no comento mucho porque no quiero revelar más de lo que ya digo en el argumento, lo que sí diré es que es muy interesante y está bien desarrollada. El ritmo de la historia es bueno y el misterio se va enredando poco a poco, haciendo que no puedas despegarte de las páginas. El final, como suele suceder en este tipo de ficciones, ni te lo esperas. Existe un segundo libro de la serie que todavía no está editado en español, trataré de estar pendiente porque a Nikki Griffin no hay que perderle la pista. Por lo que tenemos, una novela inteligente, con una protagonista fascinante, que sin duda recomiendo.

M. Zeta