Revival vol 1. Estás entre amigos

Opinión:

Anoche me leí este libro, y lo hice de tirón. No es tan fácil que me lea una novela gráfica de una sola sentada justo a la hora de dormir, pero este volumen lo tiene todo para mí: un guión atrayente, una trama diferente, magnífica ilustración, buena letra para leer cómodamente… Para cuando me di cuenta había terminado y tenía ganas de seguir. Es el volumen 1, de modo que me toca esperar al volumen 2, pero creo que la espera va a valer la pena.

Al fantástico dibujo de Mike Norton (ganador del premio Eisner) se une el magnífico trabajo de coloración de Mark Englert, que me ha llamado la atención por lo detallista (lo primero en que me fijé fueron las uñas pintadas de Dana y los brillos realistas, pero este es sólo un ejemplo, podéis imaginar que ha mimado el resto de las ilustraciones de igual forma)

En cuanto al argumento, no es la primera vez que estoy frente a una historia de resucitados que NO son zombis, y en ambos casos era películas. Creo recordar que la más parecida, al principio, era una película francesa, pero en este guión de Tim Seeley todo da un giro brutal cuando ves que sus resucitados se vuelven violentos y no parecen poder morir, porque una y otra vez se levantan. Imaginad el punto de tensión que se puede llegar a sentir cuando alguien que ha asesinado ya en más de una ocasión vuelve a levantarse. Ni a la tumba llegan…

En principio se nos presenta como la historia de unos vivos que tienen que aprender a convivir con sus muertos resucitados (ahí el parecido con las películas que comentaba es cien por cien), y esta línea está muy bien, pero se complica como a mí me gusta (alejándose por completo de los filmes).

Esta no es una historia para estómagos remilgados, aunque Englert no se ha excedido en absoluto en la sangre roja, de hecho apenas sale, ya que aun existiendo en toda la novela unas cuantas escenas con ella, la ha oscurecido para que no desviemos la atención del propio guión.

Es, además, una historia muy coral, o muchas historias en un mismo argumento, porque aquí no hay dos protagonistas: por un lado están Dana, su hijo, su hermana y su padre, el sheriff, y aquellos con los que se relacionan (como Ibrahaim, o su exmarido); por otro nos encontramos con la periodista que descubre y destapa el asunto, quien a su vez se relaciona con una anciana aborigen; también tenemos a un profesional de la psicología y a su hermanastra, que está siendo amenazada de muerte, y a su padre, un resucitado que estaba prácticamente en coma pero que ahora está nuevamente despierto y parece que le vemos sufrir -parece porque no abre la boca-; y por si fuera poco tenemos a un ser blancuzco suelto por la localidad que parece buscar almas, y a un cazador de demonios bastante psicópata.

Como véis, unas cuantas historias que acaban interrelacionándose y creando aún más expectación. Así que lo recomiendo a quien espere algo distinto y guste de crímenes con misterios que alcanzan otros niveles inhumanos… porque aquí se esconde algo más.

Por cierto, entre capítulos podemos disfrutar de ilustraciones relacionadas realizadas por Jenny Frison.

Me siento como cuando veía aquellos capítulos de Twin Peaks, absorbida con sus misterios y esperando el siguiente con unas ganas locas.

Anika Lillo