Retratos de la orilla

Opinión:

Tras la buena acogida de la colección de relatos Las noventa Habanas, que la ayudó a escalar posiciones en el mundo literario y a ser seleccionada por GRANTA (revista literaria fundada en 1879) como una de las mejores narradoras jóvenes en español, vuelve a entrar con fuerza en el panorama literario con su nueva publicación, otra colección de relatos que lleva por título "Retratos de la orilla".

Con motivo de la muerte de una anciana (muy anciana) que contaba historias a las protagonistas de todos los relatos, éstas deciden seguir con la tradición, así que cada una de ellas se pone a contar su propia historia. Son narraciones que se mueven entre Miami y Cuba, espacios muy habituales en la vida de la propia autora, que nació en Cuba pero que reside en Miami. Se trata de relatos que contienen mucha pasión, mucho drama, mucha dureza, pero, sobre todo, son relatos de mujeres.

Los 8 relatos son narrados por ocho treintañeras que han vivido amores pasionales, amores dolorosos, amores tóxicos, desamores maternales o amores mortales. La acción se mueve cerca del mar, envueltos en oleajes que tapan o se llevan ese dolor que las mujeres padecen, aparentemente, cuando ese pasado nunca va a desaparecer. Todas ellas han visto cómo una parte de su ser ha desaparecido con la marcha o desaparición de alguien.

La autora posee una excelente habilidad para adentrarse en el alma de todas esas pobres mujeres y retratarlas. La narración abandona cualquier ornamento desmesurado por la descripción de paisajes, apuntando a pequeñas pinceladas, suficientes para crear un buen ambiente. Apunta más al corazón, a los sentimientos, a las sensaciones de unas mujeres que parecen atacadas por la parte mala de la vida, pero que también poseen ese carácter para seguir luchando. Mujeres con dignidad capaces de superar los males y de demostrar su valía. Los lectores y lectoras encontrarán en ellos un reflejo, un ejemplo para continuar, y empatizarán con sus sentimientos.

Los relatos no destacan por una larga extensión. Son historias que se pueden leer de una sentada, algo que autores tan brillantes como Edgar Allan Poe defendían. Mantienen la línea temporal de introducción-nudo-desenlace, con una preferencia por dar grandes estacadas de sorpresa en el final, como esos azotes que la vida propina.

Dainerys Machado Vento (La Habana, 1986) vive en Miami y es doctora en Estudios Literarios, Lingüísticos y Culturales. Periodista, crítica de arte, editora y escritora. En la actualidad trabaja para Penguin Random House como Associate Metadata. Anteriormente había sido profesora auxiliar en la Universidad de Miami mientras estudiaba el doctorado. En 2021, fue incluida en el número especial Granta. Los mejores narradores jóvenes en español.

Cristià Serrano