Y si el amor durara

Opinión:

Con un estilo sencillo y cercano al lector, Alain Finkielkraut nos muestra desde la perspectiva filosófica, y con una base literaria, como el amor nos transforma, nos convierte en otro, cómo es ese vértigo que nos envuelve cuando nos toca a la puerta.

Es que el amor es un sentimiento de amplísima magnitud, con múltiples facetas y, al mismo tiempo, universal por nos abarca a todos en diverso niveles e intensidades, ya que una forma u otra, el amor nos marca, nos sella, es un rito de paso, hay un antes y un después del amor que es lo que la literatura nos descubre, puesto que es una creación cultural, es un elemento vivo que crece con la humanidad, con las diversas sociedades y formas de pensar, es por ello que  a través de ésta podemos llegar a conocernos a nosotros mismos, nuestros sentimientos, nuestras emociones.

El libro de Finkielkraut está desarrollado en cuatro estadios, cuatro formas de ver/sentir el amor, con cuatro autores que le influenciaron bastante y a través de los que proyecta sus teorías, sus ideas, su forma de ver el mundo. Una obra por autor, salvo en el caso de Kundera, del que toma varias de sus obras y pivota entre una y otra para enlazar con destreza sus opiniones, a lo largo de las páginas va haciéndose preguntas y respondiéndose por medio de los personajes, qué es el amor, qué nos hace buscarlo incansablemente una y otra vez, cuál es su función en el tráfago de la vida...

Son estos cuatro arquetipos los que revisamos en este libro; el lector los recorrerá uno a uno, tal vez identificándose, o a lo mejor, quién sabe, buscando entre líneas a sus propios fantasmas. Lo interesante de este ensayo es eso, entrar en la lectura de una lectura, para leerse a sí mismo, y tratar que en la vida real, ese amor ansiado dure para siempre. 

Carol Inabé Barba