Teodora, la crisálida de Bizancio

Opinión:

Jesús Maeso de la Torre es uno de los nombres de la novela histórica española. Todas sus novelas tienen un equilibrio perfecto entre lo histórico y las aventuras, entre lo didáctico y lo lúdico. Personalmente, es un autor que sigo y con el que disfruto en cada novela. Ahora, Harper Collins Ibérica acaba de publicar una de sus últimas obras, "Teodora, la crisálida de Bizancio. Del burdel al trono imperial de Constantinopla". En ella, como se puede apreciar perfectamente por el título, la gran protagonista es la emperatriz bizantina.

Es una lectura apasionante de principio a fin. A pesar de sus más de 700 páginas, se hace corta. Cuando llegas al final, deseas que continúe. Todo esto lo logra la forma de escribir de su autor. Contagia la pasión que siente al lector mientras está dando vida a sus personajes y tramas. Es un sentimiento y sensación que no puede ocultar. Me gustan este tipo de autores, viscerales, logran que el lector se meta más en la historia que están desarrollando, que la sientan.

Uno de los puntos fuertes de la novela es sin duda alguna su protagonista. Aunque Justiniano es un emperador muy conocido, quizá de los que más del Imperio bizantino, no ocurre así con Teodora. Por eso, me ha parecido mucho más interesante la novela. Teodora se muestra como una mujer de carácter, que sabe muy bien qué es lo que quiere, es fascinante cómo va ascendiendo, tejiendo hilos hasta llegar al trono. Todo ello en una Constantinopla bajo poder bizantino. Una Constantinopla capital del Imperio romano de Oriente, ya separado del occidental.

La novela arranca con las exequias de Teodora. La voz narradora corresponde al otro protagonista: Nasica el Hispano, un eunuco que no solo le sirvió desde hace tiempo, sino que también fue su confidente y amigo. Su relato permite conocer cómo conoció Teodora a Justiniano y cómo accedió al trono. Es un personaje culto, a pesar de ser esclavo, sabe muy bien lo que quiere y tiene sus ideas. Nasica representa el lado erudito de la sociedad bizantina del momento.

Es una novela muy amena de leer.  En la que el lector encuentra intrigas palaciegas, acción, batallas, amor, lealtad, es testigo de la vida en Constantinopla bajo el poder de Justiniano. Se aprecia, al mismo tiempo, la labor documental previa, algo indispensable si se quiere escribir una buena novela histórica.

Jesús Maeso de la Torre tiene un estilo narrativo elegante, le gusta utilizar términos más clásicos que le dan un aire diferente a sus novelas. Adecua el lenguaje a la época que está relatando. Su novela tiene ritmo. Logra crear una atmósfera de intriga que se mantiene hasta el final. Es muy buena.

Una novela que recomiendo muchísimo, con la que el lector va a disfrutar al tiempo que conoce mejor a Teodora.

Ysabel M.