Paris-Austerlitz

Opinión:

Rafael Chirbes falleció en agosto de 2015. Su fallecimiento fue y será muy dolido y resentido por la literatura española, puesto que el lector que se sirva de sus obras descubrirá a un escritor dotado con la palabra y con la expresión de sentimientos. Es un autor capacitado para poner palabras sentimientos o sensaciones a los que muy pocos alcanzarán cuando se narran historias de pasión, de vicio, de vacío.

El argumento es lo de menos en "París-Austerlitz". De hecho, pronto queda en evidencia que Michel está contagiado con el sida y que sólo el tiempo está alargando su irrefrenable muerte. En esta obra aquí reseñada la estética se antepone al argumento o al suspense para enmarcar un cuadro donde conviven y contienden todos los colores y todas sus tonalidades diferentes. El narrador de esta novela corta (¿o relato largo?), cuyo nombre jamás es revelado, explica los últimos compases de su relación - tormentosa, pasional, viciosa, incomprensible, feliz, incomprensible - con Michel, un obrero, que ha contraído el sida y está hospitalizado. El narrador anota en su propio diario sus experiencias y su historia particular con Michel, en un intento de hacerse una introspección personal sobre el porqué de toda esa relación, sobre todo cuando Michel es tres décadas mayor que él. Se trata de argumentar la presencia del amor y de su significado real.

La novela sobresale en el aspecto psicológico. El narrador, un pintor joven de Madrid, ofrece al lector un auténtico cuadro descriptivo de Michel, sin pelos en la lengua. Con sus palabras es capaz de ubicar la historia al lector y hacer a éste patícipe de la relación, como si fuera el mismo lector quien la hubiese mantenido.

Es una lástima que Rafael Chirbes haya dejado este mundo. Un grandioso escritor. Al menos, esta novela, la cual tardó casi veinte años en realizar, simboliza una gran forma de terminar una carrera literaria envidiable.

Cristià Serrano