Nuestros inesperados hermanos

Opinión:

El libanés Amin Maalouf contempla los tiempos que corren y, aun sin haber presenciado los efectos del covid19, prevé una catástrofe a nivel mundial si no se le pone freno. Como si de una nueva pandemia se tratase, el mundo parece ir abocado a una nueva guerra mundial, una de fatídica. Pero los amigos de Empédocles, un filósofo y político de la Antigua Grecia que hablaba de que cuatro eran los elementos que conformaban el mundo (tierra, aire, fuego y agua), aparecen de la nada, revelándose por primera vez en la Historia para intermediar y poner la paz a través de una tecnología avanzada. 

A la sazón, toda una retahíla de nuevas posibilidades se abre... mas el ser humano se debate entre el medio y la ilusión. Se despliega la oportunidad de curar enfermedades incurables, de vivir en un mundo donde el dolor o la amenaza nuclear apenas intimidan, sin embargo el ser humano, empeñado en una doctrina antropocentrista, que se mira a sí mismo y que se cree el dueño del planeta, el más poderoso, teme ante lo que puede anticipar como una amenaza, como algo que no pueda controlar. Y es ahí donde Amin Maalouf, de nuevo, muestra sus dotes artísticas para entretejer una novela preciosa que no puede dejar indiferente a nadie.

Es una novela transportadora, de aquellas en los que el lector se encarama al vagón del tren y viaja. Viaja al otro lado del Atlántico, a la costa este de los EEUU, en una islita donde viven Alec, el protagonista, un dibujante, y Eve, novelista de gran éxito estancada en su inspiración. Ambos desolados, frustrados con el comportamiento generalizado del ser humano, observan esta nueva era con mucha expectación. De hecho, se descubrirán, tras años de inexistente conversación, abriéndose entre sí a la vez que los amigos de Empédocles se abren. 

Dentro de esta distopía que el autor describe tan maravillosamente, se arroja una bonita luz de esperanza y optimismo, invitando al lector a pensar de la misma forma, a no caer en el desánimo y en creer en la humanidad. Sus personajes son verídicos, creíbles, casi a punto de palparse. Amin Maalouf es un tipo muy comprometido con el mundo y con la Historia, quien siempre busca recabar información en nuestros antepasados. El camino que hemos hecho no puede explicar si no se echa la vista atrás. El pasado explica el presente. 

El autor se halla en el pilar de los escritores clásicos. Con "Nuestros inesperados humanos", sigue escalando peldaños para permanecer entre los mejores escritores de siempre. Nacido en Libia en Beirut en 1945, es miembro de la Academia Francesa. Ganó el Premio Príncipe de Asturias en 2010 ya que el autor <<nos sitúa en el gran mosaico mediterráneo de lenguas, culturas y religiones para construir un espacio simbólico de encuentro y entendimiento>>.

Cristià Serrano