Marismas

Opinión:

Esta novela parte de la peculiaridad de que hay dos autores presentes en la portada, así que habrá estado escrita a cuatro manos, aunque no hay especificación de si la elaboración ha sido compartida en todo el texto o se han repartido los papeles. También cabe señalar que son madre e hijo.

Digo eso sobre el reparto, porque hay dos enfoques en la novela. Por una parte, hay dos personajes que se expresan en primera persona y que al principio se mantienen indefinidos hasta que más tarde aparece algún detalle que define algo de esos personajes, pero sin dar más información hasta que se descubre quiénes son cerca del desenlace. Por otra, el resto de la trama recoge en tercera persona los movimientos y pensamientos del resto de personajes, sean protagonistas o secundarios.

En lo que sí coinciden es que todos los hechos están narrados en tiempo presente, con lo que se percibe una clara inmediatez en el desarrollo, marcando una sensación de que el tiempo corre con rapidez, acorde con las prisas de los investigadores por resolver el caso. También ayuda a que la lectura avance a buen ritmo que el texto esté algo esponjado, de manera que las trescientas páginas del libro se recorren como si fuesen un puñado menos.

Respecto a la trama, el protagonismo recae en su mayor parte en el detective Nico Ros, que casi siempre está en el foco de la acción, sea que esté solo, en familia, con los policías, con su ayudante o con el narcotraficante que le ha contratado.

Son muchos flecos y algunas relaciones vienen de antes por motivos que no se llegan a explicar, como si esta novela fuese una posterior entrega dentro de una serie. También hay otro caso junto al principal, pero sólo son poco más que un par de menciones, por lo que me ha parecido un pegote metido ahí porque sí, ya que lo que se cuenta no influye para nada en el hilo principal de la trama.

Otro detalle es que aquí se conocen casi todos, incluso si están a un lado u otro de la ley, simplemente se dejan estar unos y otros, como si así hubiera un cierto control social que impidiese mayores daños. Pero también se podría tomar como una dejadez manifiesta.

Al menos, el escenario, que está situado en un paraje que es parque natural, está bien retratado, aunque se centre en una zona reducida, consistente en poco más que los humedales y la desembocadura del río Ter. Eso sí, además del temporal que lo embarra todo, aparece la casi omnipresente tramontana, un viento fuerte y exasperante para quién ande por ahí cerca.

Tal como me ha parecido, "Marismas" es una novela entretenida, que será disfrutada por el lector que se deje llevar por una trama enrevesada y que guarda algún secreto oculto en su desarrollo mientras apunta a los posibles sospechosos.

Selin