johnny be good

Opinión:

Bajo el título de esta novela, un homenaje al cantante de rock Chuck Berry, aguarda una historia que tiene mucho que ver con la canción que Berry hizo famosa a finales de los cincuenta: un chico humilde cuyo sueño es llegar a ser una estrella del rock. Y esa es justamente la historia del protagonista, Johnny Jefferson, convertido en un icono de la música. Huérfano de madre y con un padre impresentable, Johnny ha ascendido a base de esfuerzo y constancia, y ha sufrido algún que otro bache por el camino.
 
El hombre que Meg se encuentra al llegar a Los Ángeles responde al estereotipo de este tipo de músicos: bebedor, mujeriego y con algún que otro escarceo con las drogas. Pero también es guapo, tierno y tiene talento. Una combinación que resultará ser letal para los sentimientos de su ayudante.
 
Y luego está Christian, el mejor amigo de Johnny y su biógrafo, un hombre sencillo y servicial, que hará muy buenas migas con Meg y que la ayudará con el músico.
 
Aunque la novela tiene algunos momentos divertidos, no es el sentido del humor lo que la caracteriza. No se trata de la historia frívola y ligera propia del chick lit, es una historia más bien triste sobre lo bajo que puede llegar a caer una persona y el daño que puede causar a quienes le rodean. Pero es también una historia sobre el amor y la amistad, sobre la esperanza y las segundas oportunidades, y esa otra parte es la que al final termina dominando la trama.
 
La novela es muy entretenida, maneja bien el ritmo y el suspense, los personajes están muy bien retratados y los diálogos son vivaces. Resumiendo: es de esos libros que es imposible dejar hasta el final. 
 
Pilar Alonso Márquez