Horizonte del liberalismo

Opinión:

Como curiosidad, comenzaré diciendo que "Horizonte del liberalismo" es la primera obra que nuestra filósofa realizara, empezándola allá por 1929 y tras abandonar el proyecto de una novela que iba a llamar La espera. En el texto, la intelectual andaluza hace volar su pensamiento sobre la constitución de las ideas políticas, en un tiempo en el que sin duda el ambiente era una constante ebullición de posibilidades políticas.

Título transparente, lo que plantea fundamentalmente es qué futuro pueden tener en un país como España las ideas del liberalismo. Su estilo filosófico ya está presente desde este texto inicial: cada palabra medida, con una sensación de ingravidez en el discurso, como si se escribiera viendo la Tierra y quienes la habitan desde muy lejos.

Dice Jorge Novella en su buena introducción a la obra que el texto es casi una disección fenomenológica del liberalismo, y es cierto. La dedicatoria de la pieza es sumamente tierna: "A mi padre. Porque me enseñó a mirar." María Zambrano realiza una crítica interesante a la noción clásica del liberalismo, estudiándolo desde muchos flancos. Mi capítulo favorito es el llamado El liberalismo y la religión, subtitulado "el problema del individuo". También ahí tenemos ya nociones constitutivas de su filosofía posterior, pues en gran medida lo que dará después será el estudio de los problemas de los individuos en su relación con el entorno social, hasta que llegue el exilio y con él la necesidad de repensar todo el sistema.

Nos habla igualmente de la política, preguntándose de qué lugar emana, dónde surge el sentimiento o la necesidad de la misma. Una obra seminal de la filósofa malagueña que puede ofrecer mucho en estos tiempos de vaivenes políticos y en los que la identidad de una ideología está cada vez más desdibujada.

Rafael Ruiz Pleguezuelos