cielo roto
Título: cielo roto
Título Original: (cielo roto, 2011)
Autores: Francisco Alsedo, Pablo Herraiz
Editorial:
La Esfera de los Libros
Copyright: 1ª Edición, Marzo 2011
ISBN: 9788499700168
Etiquetas:
adaptación
autores
basado en hechos reales
escritores
españoles
género negro
hispanos
literatura española
literatura hispana
policiaco
Argumento:
(Se incluye un epílogo con la información publicada en un diario digital colombiano tras el caso aquí novelado y que pone el “punto y final” a la historia)
En una zona periférica de Madrid aparece a mediados de la pasada década un cuerpo semienterrado, con las piernas a la vista en las que destacan unos pies muy cuidados. La recuperación del cadáver, sin embargo, deja al descubierto algo más… Le han amputado las manos y donde debería hallarse el rostro únicamente queda un amasijo de huesos, lo que resta tras haber sumergido en algún ácido corrosivo a la víctima. No hay documentación ni nada que sirva para identificar al fallecido. Todo se reduce a un collar, aparentemente de valor, restos de una cinta adhesiva algo particular y esos pies a los que se ha hecho la manicura.
Crespo, un teniente de la Guardia Civil de carácter algo particular, es el encargado de la investigación juntamente con compañeros “azules” es decir: Policía Nacional. Esas pesquisas ponen sobre la mesa el mundo de las drogas, sicarios, mafias organizadas, corrupción… Y los métodos que usan los investigadores para ir resolviendo el caso.
Opinión:
Los autores, Pablo Herraiz y Francisco Alsedo, son dos periodistas del periódico El Mundo y el primero, reportero de la sección de sucesos, ha cubierto cientos de casos; Alsedo que se ocupa de los temas “Cultura y Madrid” y trabajó en la Agencia EFE, también tiene material de sobra para que ambos, basándose en un hecho real, hayan dado forma de novela a un crimen escalofriante por su brutalidad: el asesinato de “El Muñeco”.
La obra está escrita de forma amena y resulta francamente interesante. El lenguaje es coloquial, propio de la jerga policial. La protagoniza el teniente Crespo, un sujeto que ha instalado su oficina en el bar de la esquina y trabaja tomando cañas; resulta divertido y coloca la nota de humor. Despotrica a diestro y siniestro, jura y perjura, se pone de “mala leche” si el hallazgo de un fiambre le impide ir de pesca. Pero en el fondo ama su trabajo y es un buen profesional.
Es sugestivo ver los métodos que se siguen para identificar un cadáver como el del Muñeco, cómo indicios insignificantes llevan a encontrar pistas. El tema de las escuchas telefónicas, la estructura de algunas mafias de contrabandistas asentadas en nuestro país, los conductos que sigue la cocaína para ser introducida en España… Tampoco faltan métodos de interrogación y persuasión, confidentes, pactos… El poblado de la Cañada Real, sicarios, bandas de traficantes que roban a otras o cómo actúan las “mulas” (esas personas que entran drogas en el país dentro de su cuerpo) completan una crónica francamente instructiva.
El libro está basado en testimonios y datos reales, además de muchas fuentes, algunas al lado de la ley y otras no. Y ahí radica, en mi opinión, el atractivo de una novela que, en ocasiones, tiene visos de reportaje. Como pone en la portada posterior de la obra: “Nada es exactamente ficción en este libro, ni nada es absolutamente realidad”.
Me ha gustado mucho. Se lee de un tirón y resulta muy clarificador. Posee todos los ingredientes de una novela negra y la metodología de una crónica de investigación de sucesos.
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