Nocturnos

Opinión:

"Nocturnos" es la nueva novela gráfica de Laura Pérez, que ha sido publicada por Astiberri Ediciones, al igual que las anteriores: "Ocultos" (2019), Tótem" (2021) y "Espanto" (2022). La mayoría dentro de su colección "Sillón Orejero".

El volumen ha sido editado en tapa dura, con un gran formato de 19x26 cm, donde además cabe destacar que se ha utilizado un papel mate grueso, que tiene la calidad adecuada para presentar con acierto esta nueva historia de la autora.

Esta es la primera novela gráfica que leo de Laura Pérez, que me ha dejado con el gusanillo de leer las anteriores y, todo hay que decirlo, por completo, que un avance puede verse en la web de Astiberri, lo que está muy bien para hacerse una idea, pero me sabe a poco, así que ya veré de conseguirlas.

No obstante, sin saberlo hasta que he ojeado la biografía de la autora, situada al final del volumen, ya antes había apreciado y disfrutado su trabajo con la serie de televisión "Solo asesinatos en el edificio", por cuyos títulos de crédito (muy atractivos y que nos encantaron en casa), realizados en colaboración con el estudio estadounidense Elastic, fue nominada a los premios Emmy en 2022.

En esta ocasión, Laura Pérez ha desarrollado una historia coral, con muy diversos personajes que tienen en común su relación con la noche y la oscuridad, son esos momentos en que la mirada se abre al Universo a la vez que exploramos nuestro propio interior a la búsqueda de nosotros mismos.

Bastantes serán humanos, habiendo también algunos animales, incluyendo insectos, que tienen su propia participación, aportando su punto de vista. El foco de la acción va pasando de unos personajes a otros, con algún regreso al que apareció anteriormente, mostrando así que todos los seres estamos relacionados unos con otros, en mayor o menor medida, en este mundo que constituye nuestra realidad compartida.

Las viñetas se adaptan al momento concreto de cada historia, con tamaños variados, desde las que ocupan sólo un rincón, hasta las que llenan la página completa, siendo estas las únicas, por su propia condición, que no presentan los cantos redondeados, como ocurre con todas las demás.

Otro tanto se observa con las gamas de colores que ha utilizado para representar cada escena, que destacan cada ambiente y le aportan una entidad propia y diferenciada, de manera que se siente como si fueran los sucesivos capítulos de la obra, con el detalle de que enseguida se reconoce el regreso a un escenario anterior.

Así es que me ha gustado mucho "Nocturnos", una novela gráfica para leer con calma y sumergirse en sus historias, reflexionando al unísono con sus personajes sobre las preguntas universales que, como en sus páginas, acostumbran a aparecer de noche.

Selin