Los hombres no son islas
Título: Los hombres no son islas
Título Original: (Gli uomini non sono isole, 2018)
Autor: Nuccio Ordine
Editorial:
Acantilado
Colección: El Acantilado
Copyright:
© 2018, Nuccio Ordine
© 2022, de esta edición, Quaderns Crema, S. A
© 2022, de la traducción, Jordi Bayod Brau
Ilustraciones: B/N
Edición: 1ª Edición: 2022
ISBN: 9788419036124
Tapa: Blanda, Bolsillo
Etiquetas: antología clásicos ensayo filología filosofía cultura libros ilustrados literatura italiana relaciones sociales intelectuales sobre literatura sabiduría humanidades lectura comunidad pensamiento
Nº de páginas: 296
Argumento:
Si tuvieron la suerte de conocer libros de venta masiva como La utilidad de lo inútil o Clásicos para la vida (ambos en Acantilado, igual que el volumen que aquí reseño), no pueden dejar de acercarse a "Los hombres no son islas", volumen con el que el profesor italiano Nuccio Ordine mantiene el loable afán de reivindicar los clásicos, como fuente de conocimiento único y textos que tanto pueden enseñarnos. Extractos de autores mayúsculos como Saint-Exupéry, Petrarca, Dickinson o Hemingway, una de las mayores virtudes del volumen es que presenta autores muy variados, de todas las épocas y tradiciones. Una antología hábilmente comentada que ya es imprescindible para letraheridos que quieran celebrar con Ordine la grandeza de la alta cultura.
Opinión:
Nuccio Ordine (Diamante, Italia, 1959) lleva años encadenando éxitos más que merecidos con libros que divulgan el amor por los clásicos, abundando en la idea de que tienen mucho que decirnos. Uno de sus grandes empeños, que no puedo dejar de alabar, es convencernos de que muchos saberes que en una sociedad tan tecnológica y cientifista como la nuestra pueden quedar orillados por parecer obsoletos o irrelevantes -inútiles, si queremos resumirlo en lenguaje llano- en realidad sirven ni más ni menos que para llegar a reconocernos como seres humanos y entender mejor cómo funcionan nuestras sociedades.
Este profesor italiano despliega, como en los libros anteriores, un conocimiento profundo de clásicos de todas las tradiciones y una capacidad encomiable para hacer comentarios de texto profundos y a un tiempo accesibles. En su escritura se reconoce esa experiencia de profesor en la manera en que busca siempre ser comprensible, por muy sutil o complicado que sea el concepto que maneja según en qué texto.
El hilo conductor del libro es la idea de que no estamos solos, que formamos parte de una comunidad en la que todo está interconectado y en la que las relaciones entre nosotros son nuestra auténtica tabla de salvación. Somos verdaderamente humanos porque nos relacionamos, y la alta literatura está para que nos conozcamos mejor, nos aceptemos como somos y mejoremos como especie. El arte, la filosofía, la literatura y la religión nunca pueden ser prescindibles porque son constitutivas, nos describen y preparan ante el mundo. Sin la sabiduría de los clásicos somos más frágiles y vulnerables. Nos desconectamos unos de otros -convirtiéndonos en esas islas que nombran el volumen- y nuestras sociedades caminan en la dirección equivocada.
Una nueva oportunidad para crear esa "biblioteca ideal" de todo intelectual siguiendo la guía del profesor y escritor italiano. El título del libro está extraído de la poesía de John Donne, quien ya inspirara a Hemingway para nombrar su novela Por quién doblan las campanas. Una magnífica elección que al final vuelve a dar la razón a Ordine: hay que volver a los clásicos, siempre.
Rafael Ruiz Pleguezuelos
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