Los españoles que vivieron en Marruecos

Opinión:

Antonio García-Nieto, de la mano de la editorial Almuzara, presenta un ensayo muy completo sobre la presencia española en Marruecos. "Los españoles que vivieron en Marruecos" no se ciñe, por otro lado, a relatar el periodo de guerras, sino que va más allá: expone cómo fue la vida de los españoles que vivieron en el país africano a lo largo del siglo XX. Temática que hacía falta, ya que por lo general, los libros que hablan de las relaciones entre Marruecos y España se centran más en la Guerra del Iffni olvidando otros aspectos y periodos. Algo que ha solventado el autor con este libro.

Desde un principio, es una lectura que consigue captar la atención del lector. Como ocurre con otros libros de la colección Historia de la editorial, el lenguaje utilizado es fácilmente comprensible. No se deja a un lado el rigor histórico, pero no se opta por un estilo y lenguaje muy académico, porque el objetivo principal es llegar al mayor número posible de lectores. Que lo que habla o cuenta, se conozca. Personalmente, siempre es lo que destaco de esta editorial y de esta colección, me parece un gran acierto acercar la Historia a un público general, no ceñirla a uno minoritario.

En cuanto al libro, es un ensayo muy completo. Prácticamente, se analiza la relación entre ambos países a lo largo de todo el siglo XX, con lo que la visión es mucho más amplia. Hay una parte dedicada a los conflictos bélicos, pero se pone el foco de atención en la sociedad, en la economía, en la influencia entre ambas culturas. Y no es una anécdota, es algo que el autor hace a conciencia porque lo echa de menos, tal como reconoce en la introducción del mismo. Y este nuevo enfoque es lo que aporta mayor valor. Me parece un punto muy fuerte, este nuevo punto de vista.

"Los españoles que vivieron en Marruecos" es una lectura muy recomendada. Es muy amena a la hora de leer. Como se ha comentado, no se ha optado por un lenguaje ni una forma de escribir muy rebuscada. El autor habla de tú a tú al lector. A lo largo del libro, hay muchas imágenes. También se aprecia la labor documental que se ha llevado a cabo. El libro finaliza con una amplia referencia bibliográfica.

Es un buen libro desde el punto de vista histórico. Una lectura que recomiendo no solo por placer, también es un buen apoyo en clase de Historia.

Ysabel M.