Las chicas de la academia

Opinión:

Basada en hechos reales, la novela nos habla del derecho de la mujer a estudiar y a formarse, justo lo que promulgan las normas de la democracia en las que, entre otras cosas, se proclama la igualdad entre hombres y mujeres, ciudadanos de cualquier condición, sexo o religión; todo lo contrario a lo que se ponía en práctica en la Grecia clásica y que se denuncia en estas páginas.

Entre diversos escritos de la época se hace referencia a uno en particular, la República de Platón, un libro que a la hora de la verdad se queda tan solo en las palabras, pues los filósofos que deberían defender estos argumentos se desdicen de los mismos o miran para otro lado según les conviene; al igual que veremos que ocurre en otros asuntos a lo largo de esta trama.

En el lado opuesto se encuentran Lastenia de Mantinea y Axiotea de Fliunte, dos mujeres que se han visto obligadas a escapar del destino que la sociedad o la familia les quería imponer, y ahora se empeñan en hacer valer sus derechos para acceder a estudiar Filosofía, disciplina para la que, al igual que ocurría con otras, como la Medicina, tenían cerradas las puertas de las aulas. Lastenia, gracias a su condición de copista podrá aprender mientras lee los manuscritos que después tendrá que reproducir. Junto a Axiotea, camuflada en un mundo de hombres, comienza una aventura que les llevará a conocer a otras tantas mujeres que, tiempo atrás, iniciaron una lucha silenciosa.

Uno de los alicientes de este relato son los diferentes pensamientos filosóficos que se analizan y los debates entre aquellos que tienen acceso a la academia. Más adelante asistimos a los que mantienen nuestras protagonistas al enfrentarse a los filósofos y donde ponen en evidencia todas sus contradicciones. Pero es, durante el proceso de un juicio, donde más he podido disfrutar de la réplica en boca de diferentes mujeres.

Las frases que va dejando el autor en momentos puntuales y unos personajes atractivos, como el de Aristóteles o Hagdónica, ponen la guinda a este relato; un viaje con muchas enseñanzas. La narración, del todo amena, viene a defender que la Historia bien contada no es para nada aburrida, sino todo lo contrario.

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