La ciudad de la memoria

Opinión:

"La ciudad de la memoria" ha sido una novela que me ha encantado, y eso que yo no soy muy lectora del género policíaco. Sin embargo, Santiago Álvarez ha sabido cómo captar mi atención y hacer que no desprendiese la mirada del libro hasta llegar a la última página.

Santiago Álvarez es un escritor murciano y ésta es su primera novela que ha sido publicada por la editorial Almuzara dentro de su colección Tapa Negra. Es murciano pero, sin embargo, no ha centrado su historia en su Murcia natal sino en Valencia. Personalmente, me ha gustado que sea ella la ciudad donde sucede todo. Al ser yo de Valencia todo me ha resultado mucho más cercano y familiar. Es la Valencia más íntima la que aparece, la más negra. Perfectamente reflejada.

"La ciudad de la memoria" es una buena novela policíaca. El estilo del autor me ha recordado bastante al del escritor valenciano Ferran Torrent. Es una novela muy bien escrita. Santiago Álvarez posee un estilo narrativo muy bueno. Desde un primer momento sabe cómo captar la atención del lector y hacer que se meta de lleno en la historia que se está narrando. Para ello se sirve de un ritmo frenético. "La ciudad de la memoria" es una novela llena de ritmo y de acción. Muchas veces, mientras la estás leyendo, te da la sensación de que estás viendo una película de cine negro, tiene una gran base cinematográfica cosa que contribuye a hacerla aún más buena. De hecho, el personaje del detective Mejías es en cierto modo, un guiño al de Philip Marlowe que interpretó Bogart.

El lector no se aburre con el personaje de Mejías. Tiene mucha ironía y es un detective bastante peculiar que en vez de tener el último modelo de ordenador en su oficina, tiene una Olivetti del 78. Un hombre valiente, que no teme a nada ni a nadie, a quien no le importa el peso que tiene la familia Dugo-Escrich. Él sabe que debe resolver el caso y lo hará. Su alter ego es Berta. Me ha encantado que el personaje que da la réplica a Mejías sea una mujer. Ella es todo lo contrario. Un personaje, que al igual que le sucede a Mejías, va calando en el lector. Me ha fascinado la personalidad que le ha dado el autor: una chica decidida, sin miedo a nada, amante de la Fórmula 1 y de los coches, que aporta sus dotes periodísticas para resolver el caso. Un personaje femenino muy bien construido.

Y, aunque no lo indica por ningún sitio, el lector se queda con la convicción de que ambos volverán a ser protagonistas en nuevas entregas. Que habrán más casos que resolver. Algo de lo que me alegro.

Santiago Álvarez tiene ojo a la hora de crear personajes. Todos los que aparecen en la novela son claves. Ninguno de ellos está de más. Otro aspecto que me ha gustado mucho es la pequeña parte histórica que tiene la novela. No es una novela histórica pero hay una mirada al pasado, a la década de los años 30 del siglo XX, que es importante porque nos explica el por qué de muchas cosas entre ellas el origen de la familia Dugo-Escrich.

"La ciudad de la memoria" tiene, por lo tanto, todo lo que busca el lector en una buena novela negra: intriga, asesinatos, misterios, humor, aires de cine negro de los años 40...Por ello no puedo más que recomendar su lectura y, por supuesto, a su autor.

Ysabel M.