La apelación

Opinión:

El formato epistolar no es nada común en el género negro y eso es una de las cosas que hace tan especial a "La apelación", una obra cuya trama no sería tan motivadora en otro formato. Todo el libro se basa en fragmentos de conversaciones, emails, informes y otros documentos escritos. La mayor parte, hasta que se produce el asesinato, están en orden cronológico, intercalando algunos mensajes de las pasantes comentando lo que llevan leído.

Hay una cosa que me ha chocado un poco y es que prácticamente todos los personajes prioricen los emails sobre los mensajes directos aun en situaciones en las que estos últimos serían lo más cómodo. Le da a la autora posibilidad de extenderse, pero le resta credibilidad.

En principio, no sabemos ni siquiera quién es asesinado (aunque empiezas a intuirlo porque hay un personaje que puede ser blanco en varios frentes), pero sí vas viendo muchos potenciales puntos de fricción: la recaudación de fondos benéfica huele a chamusquina, todo gira en torno a una familia que tiene demasiado poder con la comunidad, la obra de teatro es caótica y hay roces en uno de los trabajos.

Conforme avanza, te vas quedando con la intriga, aunque algunas partes se hacen bastante pesadas porque Issy, un personaje que está bastante mal de la cabeza y es lo más cargante, es también el personaje cuyos textos predominan más y se hace un poco cuesta arriba leer algunas de sus partes.

Después del asesinato, se van añadiendo varias preguntas: quién es el asesino, quién lo sabía, quién es el inocente encarcelado, quiénes dijeron que eran otra persona, quién de los que intervienen en la historia no existe... También aparece nueva documentación sobre el caso que va conduciendo hasta el descubrimiento (desde interrogatorios hasta nuevos emails que han encontrado), aunque para el lector puede haber mucha información faltante por no tener algunos conocimientos técnicos que conducen a las pasantes a avanzar en sus pesquisas.

En definitiva, una trama normalilla se vuelve interesante gracias a su formato epistolar, aunque tiene sus más y sus menos, pero en general es una lectura entretenida.

Déborah F. Muñoz