Historia de Filipinas. Las islas del rey

Opinión:

De todos es conocida la presencia española en Latinoamérica, pero hubo otra zona que también fue muy importante para el Imperio español del siglo XVI: Filipinas. Pero, a diferencia de lo que ocurre con América del Sur, sobre Filipinas no hay tanta bibliografía ni estudios. De mano de la editorial Almuzara, Miguel del Rey y Carlos Canales presentan un ensayo en el que analizan la presencia española en este país.

El título de la cubierta es "Historia de Filipinas: las islas del rey", pero el verdadero es el que encontramos en la portada: "Las islas del rey: España en Filipinas".

Es un ensayo muy completo. Abarca desde la llegada de los españoles en el siglo XVI hasta la independencia en 1898. Ambos autores dejan constancia en su libro la importancia que Filipinas tenía. No solo era un enclave comercial, punto de parada obligatoria en la ruta entre América y Asia, sino también geopolítica. Una situación, esta última, que le llevaba a estar codiciada tanto por sus vecinos japoneses y chinos, como por los portugueses y británicos.

La relación con la metrópoli tuvo altibajos, pero los vínculos con España se mantuvieron y aún pueden verse rastros de esta presencia. En el siglo XVI, Manila se convirtió en la primera ciudad europea de Asia.

"Historia de Filipinas: las islas del rey" es de lectura rápida y amena. El estilo narrativo es ágil y cercano pero sin dejar a un lado el carácter didáctico. Almuzara ha presentado una edición con abundantes imágenes en blanco y negro, así como referencias documentales que aportan solidez a cada argumento que plantean los autores. Tampoco se olvida de la referencia bibliográfica. Es una lectura amena, pero rigurosa y objetiva.

El libro sigue la tónica de la colección Historia de la editorial. No está pensado solo para historiadores, sino para un público lector mucho más amplio. La idea principal es que se conozca la Historia de Filipinas y el vínculo fuerte que hubo entre España y ella. Personalmente, no solo me ha parecido buena e interesante, sino que creo que debe darse más a conocer. Es una buena obra de referencia que completa la etapa colonial española, no solo en América, hay que tener en cuenta también a Filipinas.

Ysabel M.