Hereje

Opinión:

"Hereje" es una tenebrosa novela gráfica con guion de Robbie Morrison y dibujo de Charlie Adlard, que ha sido publicada por Planeta Cómic en volumen de tapa dura y gran formato de 21 x 30 cm.

El dibujo en blanco y negro consigue que el ambiente sea ominoso en muchas escenas, haciendo que destaquen sobremanera aquellas ocasiones en que el paroxismo inquisidor se presenta con unos rojos que son reflejo de las más obscuras obsesiones; también habrá otra escena tremebunda, al menos para su víctima, en ese mismo estilo, que será provocada por el mismo Cornelius Agrippa.

La presentación de la historia recurre a unos supuestos diarios de uno de los protagonistas, Johann Weyer, que se descubrirían en posesión de Sigmund Freud, quien los habría mantenido ocultos en compartimento secreto de su estudio.

Tras ese preámbulo, de poco más que un par de páginas, llega una truculenta historia de ambiciones desmedidas, propias de egos superlativos y depravados, que serán el contrapunto, a veces excesivo porque los protagonistas tampoco son un dechado de bondad, de Cornelius Agrippa y Johann Weyer, a cuyo servicio se ha desarrollado esta trama.

A medida que avanza la historia, se entremezclan las terroríficas escenas de las actuaciones de la Inquisición contra las víctimas que han escogido, casi siempre por turbios intereses, con otras familiares y costumbristas centradas en la historia y las acciones de Agrippa y el joven Weyer, con toques humorísticos y desdramatizadores, además de la intervención de Juliette, una hija de Agrippa, que destaca por su carácter un tanto insolente y su escasa sujeción a normas, ya sean sociales o paternas.

La investigación de estos, ya sea juntos o por separado, intenta seguir la pista de las horrendas muertes que se van sucediendo, con visitas a los barrios bajos cuando es menester conseguir algún dato determinante o sustancioso; aunque en esas pesquisas también se verán en serios problemas, poniendo incluso en riesgo la propia vida.

Supongo que los autores, aun habiendo extremado los asuntos turbios, sobre todo de la Inquisición y los poderes fácticos de la ciudad, tenían que guardar una cierta coherencia histórica, de manera que estaban obligados a mostrar un desenlace adecuado a las circunstancias conocidas; no obstante, ese giro final, más que sorprendente, me ha resultado desconcertante, un artificio que me ha defraudado.

Sea como sea, "Hereje" resulta una contundente novela gráfica, que atrapa desde el principio, con una combinación de guion y dibujo que se hace muy atractiva, enganchando al lector en los vericuetos de una historia bastante completa.

Selin