El señor Norris cambia de tren
Título: El señor Norris cambia de tren
Título Original: (Mr. Norris changes trains. 1935)
Autor: Christopher Isherwood
Editorial:
Acantilado
Colección: Narrativa del Acantilado
Copyright:
© 1935, Cristopher Isherwood
© 2016, Quaderns Crema S.A.
Traducción: Dolores Payás PuigarnauEdición: 1ª Edición: Enero 2016
ISBN: 9788416011773
Tapa: Blanda
Etiquetas: comunismo conspiraciones negocio espionaje política nazismo nazis novela prostitución siglo XX años 30 agentes dobles crisis política homosexualidad chantajes traición ironía y sarcasmo doble moral partido comunista camisas pardas sumisión masculina NSDAP Weimar
Nº de páginas: 272
Argumento:
En 1931, a bordo de un tren con destino a Berlín, William Bradshaw conoce a Arthur Norris y, a partir de aquel momento, su vida no vuelve a ser la misma. Norris tiene origen británico, dirige un turbio negocio de importación y exportación en Berlin. Le acosan su secretario Schmidt y sus acreedores. Vive agradablemente sometido a su amante, la prostituta Anni. Su personalidad es voluble y se define, según la ocasión, como militante comunista, orador político, espía y agente doble.
Es una novela inspirada en las experiencias que Isherwood tuvo en el Berlín de la república de Weimar. Irónica, aguda y trascendente, nos muestra todas las facetas de la ciudad durante el auge del nazismo.
(argumento editorial)
Opinión:
"El señor Norris cambia de tren" es una obra ingeniosa y ácida. Divertida pero no superficial. William es un hombre franco, noble, y leal, lo que podríamos llamar una buena persona. Norris, sin embargo, es un interrogante, es variable, inseguro, disparatado, asustadizo y un tanto sumiso. Es alguien que miente y usa máscaras para lograr sus objetivos y, en ocasiones, presenta una ética dudosa camuflada de buenas intenciones. Su personalidad es menos firme y cede ante las presiones y amenazas.
Hay otros personajes relevantes como la casera Fräulein Schroeder, acogedora, calmada y cotilla. También Bayer, el pragmático y equilibrado líder del partido comunista. Y Kuno, un noble excéntrico que vive parcialmente en su mundo de fantasía y oculta parte de su manera de ser y de sus preferencias. Y para el final dejo al oscuro, chantajista y perverso Schmidt, que disfruta atormentando a Norris desde su posición de secretario.
Plasma de una manera amena el contexto histórico, las tensiones políticas. la problemática de los ciudadanos y la presión que el partido nazi comenzaba a hacer sobre la sociedad mediante la S.A. Nos muestra que en las calles de Berlín se respiraba una amenaza creciente y un riesgo constante.
El estilo es un tanto ampuloso sin afectar al ritmo de la narración ni hacer que la lectura resulte pesada. Las descripciones de los lugares, las emociones y las personas son muy visuales y detalladas. Si lo unimos al narrador en primera persona del singular y en pasado nos da una impresión bastante clara de lo que William ha contemplado y nos presenta en forma de recuerdos fidelignos.
Otro punto fuerte de esta novela son los diálogos. Todos los personajes están dotados de cierto nivel de inteligencia y se dan enfrentamientos, alianzas, conspiraciones y situaciones cómicas que llaman mucho la atención por su calidad y por como los ejecutan los implicados de acuerdo a sus marcadas personalidades.
Todos estos factores hacen que "El señor Norris cambia de tren" sea una lectura muy recomendable para los apasionados de la historia del siglo XX. Muestra la antesala de uno de los mayores conflictos de esa época en clave de ficción con una trama muy elaborada y una visión cínica con un toque humorístico que la refuerza.
Noelia Montalbán
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Comentario de los lectores:
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