El abanico japonés

Opinión:

Quien esté buscando una buena novela con todo el sabor de las clásicas inglesas del XIX, debe leer "El abanico japonés". Acaba de ser publicada por la editorial Opera prima y su autora es Marta Muñoz Barrero. Personalmente, he de decir que me ha encantado, he disfrutado mucho leyéndola. 

Es una novela romántica en la línea de las de Jane Austen y otras escritoras inglesas como Julia Quinn. Y no solo porque se desarrolle en la Inglaterra de principios del XIX, sino porque tiene toda la esencia que proporcionan estas novelas. Hay un amor apasionado, obstáculos, una mala malísima, intrigas, emoción, suspense, sensualidad... Todo ello para mantener alerta al lector e impedir que se aburra.

Como ocurre en todas las novelas, para que la historia que se está desarrollando funcione de veras, debe contar con unos personajes que no aburran, sino que impacten al lector. Aquí se consigue. El personaje principal es Claudia D' Angelo. No es una joven calladita, que pasa desapercibida, sino que su carácter es el punto más fuerte de su personalidad. Es una joven impulsiva que no se corta ante nada y menos ante el amor. Si ha de demostrarlo, lo hace. Una personalidad y forma de actuar que choca con la de Raoul Radcliffe, que es todo lo contrario: más serio, comedido, marca mucho el protocolo y la forma de actuar, algo también comprensible, pues estamos en la Inglaterra de principios del XIX, no en la actual. Ambos son los personajes principales, luego hay otros secundarios, pero con peso en el argumento como Ethan, Italia o Eridan. Estos personajes serán un gran apoyo para Claudia.

La novela está muy bien escrita. Claudia habla siempre en italiano con su hermana Italia, los diálogos entre ambas están escritos en castellano, pero en cursiva para diferenciarlos del resto. El ritmo de lectura es muy ágil. Hay un equilibrio entre la parte dialogada y los textos puramente descriptivos.

Por la información que hay en la solapa, sé que Marta Muñoz Barrero ha escrito más novelas, pero no las he leído aún. Así que ha sido con esta con la que la he descubierto. Me parece una buena autora, sabe cómo contar y narrar su historia. Ella habla, a lo largo de la novela, por boca de Claudia. Hay dos voces narrativas: primera persona, cuando es Claudia quien habla, y la tercera. El estilo narrativo es elegante, bueno, ágil. Es una lectura con la que no te aburres pues tiene momentos divertidos.

Quiero mencionar también la imagen de la cubierta. Es una imagen hermosa y que nos da una pista sobre lo que vamos a encontrar en el interior. Si estás buscando una buena historia que te emocione y te haga pasar un buen momento, esta es la indicada.

Ysabel M.