Cloruro de sodio

Opinión:

Después de la breve exposición de algunos hechos, aparentemente aislados, y tras el hallazgo del cadáver de una mujer ahorcada, los miembros del Departamento Q inician una investigación en la que no tardan en aparecen los primeros indicios de que se encuentran ante un asesino en serie que llevaría muchos años actuando. La frecuencia de los asesinatos y un puñado de sal en el escenario de los crímenes son las primeras pistas que ponen en la pizarra para establecer el posible perfil del asesino, así como su modus operandi.

De forma paralela al relato policíaco nos introducimos en la mente del asesino y nos ponemos al corriente del juego que lleva años elaborando; una partida que no tiene visos de terminar y en las que va introduciendo nuevos ingredientes de crueldad y venganza; al hilo de esta puesta en escena surgen una serie de episodios donde los personajes se toman la justicia por su mano y el texto pone sobre la mesa cuestiones éticas y morales a las que nos enfrentamos en nuestro día a día en cualquier población del mundo. Unos planteamientos que hacen que el lector juegue con ventaja y esté siempre un paso por delante del grupo de Homicidios, quien no tarda en abrir las puertas a otros casos que permanecían sin resolver; razón principal por la que se creó el Departamento Q.

En las subtramas de esta entrega el peso recae sobre Carl Mørk, acusado de un delito que podría llevarle a la cárcel y poner fin a su carrera; y en el asistente de origen sirio, Assad, quien tiene a Inmigración acosando a su familia. Dos episodios que forman parte del desarrollo de la serie, donde es habitual encontrarse con pequeñas historias de los personajes principales que no influyen en ningún caso para esta entrega, la novena, cuya trama es autoconclusiva.

Los diferentes capítulos corren dentro del marco de la pandemia por coronavirus, la cual obliga a sus miembros a estar confinados en sus casas. Una medida que les supone tener que realizar las investigaciones por separado y dedicarse a buscar información a través de las redes y todo tipo de coincidencias posibles con las escasas pistas que han ido recopilando de los distintos homicidios ocurridos durante años.

Los nuevos crímenes van estrechando el círculo, pero para llegar a ese desenlace tan deseado nos queda una búsqueda a contrarreloj a la que ya estoy acostumbrado en esta serie, donde el ritmo va de menos a más hasta encontrarnos ante un thriller policíaco trepidante que me ha dejado con ganas de enfrentarme al siguiente caso, ya que justo empieza donde este acaba.

Porlomenix