Un hada con el ala rota

Opinión:

"Un hada con el ala rota" es un cuento infantil escrito por Chiki Fabregat e ilustrado por María Brenn.

Está editado por Edebé y pertenece a la colección "Tucán Verde" lo cual indica que es para niños de 10 años en adelante. La colección de Tucán está ideada para niños de diferentes edades, de tal manera que les puede acompañar con diferentes cuentos durante su crecimiento. La edad para la que están pensados se diferencia por el color de la colección. Todos tienen el mismo estilo de edición, lo cual se agradece para los niños que padezcan algún tipo de TOC o autismo y tengan problemas con los cambios visuales.

Chiki Fabregat ha escrito numerosos libros para un público infantil y juvenil de diferentes edades. Además, da clases de Escritura Creativa y dirige el departamento de Literatura Infantil y Juvenil de la Escuela de Escritores. Ha sido ganadora del Premio Gran Angular 2021 con su novela juvenil "El cofre de Nadie".

Las ilustraciones de María Brenn me han encantado. Tienen un aspecto infantil y unos colores muy llamativos y con un bonito contraste entre ellos. Algunas de las expresiones de los personajes me han recordado a una mezcla de anime, que sin duda llamará la atención de los niños, ya que parecerá que leen un libro para más mayores. Las ilustraciones se complementan a la perfección con el texto, para que los niños se entretengan observando los detalles e identificando la escena en concreto que acaban de leer.

La narración de Chiki Frabregat, al igual que en los otros libros que he leído suyos, es muy fluida y ligera para que los niños lo puedan leer solos, ya que el vocabulario está totalmente adaptado. Además, el toque de fantasía que aporta en la historia hará que los niños se enganchen a su lectura.

"Un hada con el ala rota" es una lectura muy bonita sobre el valor de la amistad, la confianza y la superación personal.

La protagonista principal es Ada, una niña muy especial. Sus padres le cuentan siempre una historia mágica sobre su nacimiento, entre las hadas, y el accidente que tuvo por el cual perdió un brazo. Ada adora la historia, pero no se la cuenta a sus amigos porque tiene miedo de que se rían de ella.

Debido al fin de curso, Ada y sus compañeros van a un campamento, en el cual hay una tirolina gigante en la que todos quieren subir. Pero Ada duda que debido a su situación, ella pueda montar. Sus compañeros empiezan a cuchichear y Ada cree que es por su culpa.

Me ha gustado mucho el enfoque que la autora aporta a la historia, debido a la pequeña discapacidad de Ada. Aun así, ella realiza muchas situaciones por sí sola, y las que no puede, recibe ayuda de sus padres o su amiga Carol. Ada anima a los niños a que confíen en sí mismos y a no sentirse menos que nadie por, como en su caso, no tener un brazo. Lo cierto es que ella lo lleva con mucha naturalidad y sus compañeros de clase también, tal y cómo debería de ser.

Ada supera las diferencias, y confiando en sí misma y en Noa, logra subir a la tirolina y tirarse por ella, no sin antes vencer sus miedos y ayudar a Noa a superar los suyos. Es importante confiar en uno mismo, pero también en los demás y no dejarse llevar por los prejuicios.

Al igual que en otros libros infantiles, Chiki Fabregat destaca también la importancia de la amistad. Ada se lleva una sorpresa cuando descubre la realidad sobre los cuchicheos y las miradas que veía por todas partes.

Vane Gómez