El tercer testamento
Título: El tercer testamento
Título Original: (Biblical, 2014)
Autor: Christopher Galt
Editorial:
Roca Editorial
Copyright:
© 2014, Christopher Galt
© Roca Editorial de Libros S.L.
Traducción: Julia Osuna AguilarEdición: 1ª Edición: Mayo 2014
ISBN: 9788499188133
Tapa: Blanda
Etiquetas: aventuras ciencia ficción género negro enfermedades mentales misterio policiaca intriga novela suicidios thriller alucinaciones pseudónimos locura neurociencia
Nº de páginas: 400
Argumento:
El mundo está teniendo alucinaciones. Personas de todos los puntos del planeta, aparentemente sin nada en común, están sufriendo un mismo trastorno: son capaces de experimentar de forma vívida alucinaciones en las que asisten a sucesos del pasado. Suyos o de la humanidad. O del futuro. No hay nada que indique el origen o la causa de lo que poco a poco va convirtiéndose en pandemia y que viene acompañado de oleadas de suicidios. Sólo John Mcbeth, que participa en un proyecto de neurociencia, parece capaz de desentrañar el misterio.
Opinión:
Las enfermedades misteriosas que asolan el planeta y dejan a los supervivientes en un mundo apocalíptico contra el que tienen que luchar son, desde hace unos años, el pan nuestro de cada día en las estanterías de thriller. No es, con sinceridad, un género que me atraiga, por lo repetitivo de premisas, personajes y soluciones que suele presentar, pero en ocasiones aparece algún título que capta mi atención. Este fue el caso de "El tercer testamento", que en vez de ofrecernos el fin del mundo a través de una enfermedad física letal lo hacía a través de lo que en apariencia es una pandemia de locura.
Una vez terminada no puedo decir que me arrepienta, pero tampoco puedo dedicarle emocionados halagos a un libro cuyo mayor mérito, y no es pequeño, es haberme mantenido entretenida durante las horas que duró su lectura.
El planteamiento de la trama es bueno, y su recurso a la ciencia está mejor documentado que muchos, pero acaba cayendo en manierismos habituales en este género, como el enfrentar ciencia y religión y hablar de la fe en la primera como una segunda religión tan ciega como cualquier otra. Y, sin embargo, en un libro cuyo principal objetivo es plantear qué es la realidad, este debate podría estar bien justificado y salir airoso, si no se hubiera acudido a los tópicos de siempre.
La lectura es ágil y rápida, aunque da la sensación de que podría beneficiarse de un mejor trabajo de edición que equilibrara calidades (hay fragmentos brillantes y rápidos y otros más pesados y lentos, menos desarrollados). Una buena lectura para las tardes del verano que, sin embargo, no dejará una gran huella en nosotros.
María Martín
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