el método logi

Opinión:

Nicolai Worm  es un médico ecotrofólogo alemán, experto en nutrición, que propone con este método una alimentación basada en una inversión de la pirámide nutricional convencional, lo que redunda en una dieta pobre en carbohidratos, que él denomina como “tipo paleolítico”, similar a la que constituía la alimentación de nuestros antepasados. El término LOGI significa “Low Glycemic and Insulinemic Diet” o lo que es lo mismo “método dietético para fomentar unos niveles bajos de glucosa e insulina en la sangre”. Propone por tanto una alimentación que trata de evitar que el nivel de azúcar en la sangre y la secreción de insulina aumenten en exceso, lo que a su vez redundará en una pérdida de peso de forma natural y gradual. Es más un estilo de vida que una dieta en sí misma. Los consejos alimentarios que recoge en su método están avalados por la Clínica Universitaria de Harvard (Boston) quien ya presentó como alternativa dietética la pirámide LOGI, y de ella obtuvo la autorización para divulgarla en los países de habla germana.

El método LOGI se presenta como adecuado para todo el mundo pero sobre todo para personas con exceso de peso o personas que sufren de diabetes o de gota, pero también para personas delgadas y niños, puesto que incluye todos los nutrientes y es más un estilo de vida que una dieta.

El método es un compendio de las recomendaciones nutricionales más habituales: comer más frutas -aunque preferiblemente evitando las más azucaradas- y verduras, alimentos ricos en proteínas como carnes magras y pescados, e incluso grasas y aceites, permitidas y aconsejadas siempre que sean de buena calidad. Desaconseja sin embargo la ingesta de alimentos que durante muchos años se han considerado básicos como por ejemplo los cereales, aunque sean integrales, o las patatas cocidas con piel. No recomienda aunque tampoco prohíbe del todo los cereales de harina refinada (blanca) ni los dulces.
 
Para el doctor Worm resulta inconcebible que los que se consideran “gurús de la alimentación” sigan propagando que los cereales y otros productos ricos en almidón, sean los alimentos básicos de los seres humanos. Según Worm, los hidratos de carbono son una forma moderna de cebar al ser humano y esta especie de carburante puede ser sustituida perfectamente por otros nutrientes. Una dieta rica en hidratos de carbono redundará en una menor quema de grasa, además de que el cuerpo tiende a transformar en grasa toda la glucosa que no puede quemar y por consiguiente, engordamos.
 
Los hidratos de carbono, según Worm, abren aún más el apetito y además son nocivos para la salud aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso de cáncer. Reemplazar los hidratos de carbono por proteínas reduce el nivel de azúcar en la sangre, evita la aparición de ciertas enfermedades y consigue que se adelgace. El efecto de los hidratos de carbono es tan nocivo para el doctor Worm que incluso propone sustituirlos en parte por grasas, preferiblemente ricas en ácidos grasos omega 3 monoinsaturados y poliinsaturados. La combinación de proteínas y grasas en la comida no supone ningún problema para el metabolismo pero sí la combinación de hidratos de carbono y grasas, por lo tanto, quien no esté dispuesto a renunciar a los cereales, las patatas o el arroz, será mejor que los acompañe con frutas y dulces, azúcar o miel, incluso, antes de hacerlo con grasas.
 
En el libro se especifican mediante unas tablas el índice glucémico y la carga glucémica de los diferentes grupos de alimentos para ayudar a reconocer los más aconsejables y por el contrario, los que no lo son.
 
La pirámide LOGI invierte la pirámide nutricional más convencional y que todos conocemos, poniendo en la base de la misma las frutas y verduras sin almidón o con bajo contenido del mismo, permitiendo la ingesta de ensaladas y verduras en abundancia. Por el contrario, los productos fabricados con cereales (pan, repostería…) o las bebidas azucaradas, están situados en la punta de la pirámide, por lo que su ingesta deberá ser muy ocasional y se deberá evitar en la medida de lo posible.
 
El doctor Worm diferencia su método de la dieta Atkins, diciendo que ésta prohíbe radicalmente el consumo de hidratos de carbono y el método LOGI lo restringe a un consumo ocasional pero no total. También la diferencia de la dieta creada por Montignac, puesto que no condena, como hacía el francés, todas las grasas animales.
 
El libro viene acompañado de otros consejos para adelgazar, como eliminar la báscula,  medirse el contorno de la cintura y olvidarse de contar calorías. Dedica también varios apartados a la necesidad de hacer ejercicio físico, aconsejando las actividades físicas más adecuadas, su intensidad y la frecuencia necesaria. También propone consejos para seguir el método incluso si hay que comer fuera de casa y propone ejemplos para cada comida.
 
Por último viene acompañado de una serie de recetas de cocina de todo tipo adaptadas al método, donde hay una gran variedad de combinaciones y prácticamente para todos los gustos. 
 
María del Mar Gázquez