El diario de Anne Frank. Novela Gráfica

Opinión:

Quien, como yo, leyera el "Diario" de Anne Frank (Ana Frank en mi época) muy jovencita (o jovencito) y descubriera entonces la existencia del nazismo, los horrores de la segunda guerra mundial, la persecución de los judíos y el holocausto, encontrará en este volumen un recordatorio de aquello que le hizo querer saber más.

En mi caso al menos fue así porque el "Diario" de Anne Frank no habla del nazismo más que de pasada o por obligación y yo quise saber más. A partir de ahí -a partir de ese libro- leí sobre la II Guerra Mundial hasta decir basta.

¿Por qué Anna no hablaba más de eso en su diario? Porque Anne era una adolescente, su vida hasta el momento era el colegio, los estudios, los amigos, los posibles primeros novios… Su vida era otra, y decidió no perderla mientras estuvo forzosamente cautiva.

En la casa, Anna convive con su familia y con otras personas más, y es así como al fin puede descubrir que el amor puede encontrarse en cualquier parte, pero para cuando se dé cuenta de que ha dejado de ser una niñita, ya será tarde.

El diario de Anne es eminentemente sentimental e íntimo. En él Anna se queja de las quejas de los demás, de cómo la tratan, de cómo son sus relaciones con su hermana, con su padre, con su madre, con Peter o con los otros con los que convive a la fuerza, de cómo se vive con miedo, con esperanzas de salir, soñando, aguantando, cambiando… En dos años pueden pasar muchas cosas, pero no tantas dentro de una buhardilla.

Para quienes leyeran el "Diario" y no les dijera nada en su momento, puede que tampoco les diga nada ahora, pero la novela gráfica es una preciosidad. Es realista, y parte de los beneficios que se obtiene de su venta llega a UNICEF mediante la Fundación Anne Frank Fonds.

Sobre todo, con lo que te quedas, es con que Anne era una soñadora, y el Tercer Reich se cargó sus sueños de cuajo. Sin piedad.

En cuanto al formato, aunque lo edite el sello Debolsillo, tiene el tamaño normal de un libro (no de bolsillo) y está encuadernada en tapa dura. Hay calidad.

Anika Lillo