El bosque sabe tu nombre

Opinión:

"El bosque sabe tu nombre" es la primera novela de Alaitz Leceaga. Ambientada en los 20 de siglo pasado, la historia nos sumerge de lleno en una historia de dramas familiares, misterios y supervivencia. Al inicio de la historia conocemos el secreto de Alma y Estrella, las dos hermanas hijas de los marqueses de Zuloaga, amenazadas por una maldición que pesa sobre la familia. Una de las dos morirá antes de cumplir los 15 años. Con esta primer misterio nos adentramos en el bosque de Basondo, un entorno lleno de embrujo que nos atrapa desde el primer momento en el que lo pisamos a través de las páginas.

Alaitz Leceaga ha firmado un debut perfecto con "El bosque sabe tu nombre", que se ha convertido en todo un fenómeno editorial nada más publicarse. La manera de hilar la historia de la autora, la prosa que desarrolla y cómo entremezcla los personajes y los lugares hasta darles una entidad única hacen que la historia atrape desde el primer momento.

Ya desde las primeras páginas vemos que el realismo mágico es uno de los pilares de esta novela. Lo irreal, lo misterioso, se entreteje con la realidad convirtiéndose en algo cotidiano. El embrujo de los bosques del norte, las historias de lamias y brujas se convierten en un personaje más de esta novela. Quienes busquen historias de terror sobrenatural quizás se sientan decepcionados, por eso es importante conocer que el misterio que envuelve toda esta historia es ese tipo de embrujo mágico que sólo se entiende gracias a leyendas y supersticiones internas.

Pero no sólo el entorno es lo que llama la atención de esta novela: también los personajes. La protagonista, cuyo nombre no revelamos para mantener el misterio de la maldición, se convierte con el paso del tiempo en una mujer fuerte y resolutiva. Una mujer que decide tomar las riendas de su destino en cada una de las situaciones a las que se enfrenta. Atrapada en un mundo de hombres, la protagonista de "El bosque sabe tu nombre" se nos muestra como una suerte de Escarlata O'Hara: no dejará que ningún hombre le arrebate lo que más desea y estará dispuesta a hacer cualquier cosa por seguir siendo la dueña de su vida.

El resto de personajes combinan a la perfección con ella: la autoridad y maldad del marqués, que se cree dueño de todo, los hombres con los que tendrá que lidiar a lo largo de la vida y las mujeres con las que se cruzará, que demostrarán que la sororidad existe desde tiempos inmemoriales, aunque había quedado relegada a la intimidad y la vida privada de las mujeres.

Los distintos escenarios por los que transcurre "El bosque sabe tu nombre" están muy bien tratados. Alaitz Leceaga lleva a la protagonista de los acantilados del Cantábrico, donde podemos sentir las olas, hasta las llanuras de California, donde el calor nos abrumará y nos hará sentir el agobio del desierto. La manera de mostrar, más que de contar, cada uno de estos escenarios hacen de la novela un combo perfecto para sentir, casi de primera mano, lo que siente la protagonista. Mención especial merece Villa Soledad, la casa de Basondo donde pasa la infancia de las niñas y que tiene un peso importante en la historia. Villa Soledad no es sólo una mansión victoriana, es una casa viva, llena de secretos, de recovecos y de alma.

En definitiva, "El bosque sabe tu nombre" es una historia llena de supervivencia, engaños, apariencias y mucho misterio. Una novela que se queda dentro y nos acompaña en silencio, como el bosque de Basondo.

Marina Montes