Lo que queda de nuestra historia

Opinión:

"Lo que queda de nuestra historia" es una novela juvenil romántica escrita por Kristin Dwyer.

En ella nos presenta a Ellis, una chica con una vida dura. Su madre la ha ignorado siempre, y su padre ha estado entrando y saliendo de la cárcel desde que tiene memoria, por lo que su estabilidad familiar es inexistente.

Ellis siente que no tiene un hogar, al menos hasta que aparece Easton en su vida, junto a su familia. Pronto se convertirá en una más, aunque no puede evitar pensar que es una obra de caridad, que sienten compasión por ella… algo que no puede soportar. Por eso, a pesar de todo, se siente una intrusa en esa familia, siente que traiciona a los suyos por el mero hecho de aceptar su cariño. Ellis, a pesar de su edad, es más madura que la mayoría, aunque no por ello dejará de comportarse de una manera más infantil en ocasiones.

Easton siempre ha sentido fascinación por Ellis, incluso antes de conocerla. Desde el primer momento le abre sus brazos y su casa, le entrega su corazón. Es capaz de hacer lo que sea, hasta renunciar a ella si es por su bien. Un "error" que pagará con creces…

Y es que de eso trata esta historia, de amor, de sentimientos reales y profundos de dos jóvenes que sienten demasiado y que se "traicionan" mutuamente, pues muchas veces el amor no es suficiente. Ese año alejados los cambiará y su reencuentro será definitivo: o bien va cada uno por su lado a partir de ahora o se dan una segunda oportunidad.

La narración alterna el presente con el pasado, permitiéndonos conocer la historia de los personajes y lo que ocurrió para que llegaran a ese punto del presente, a esa separación que tanto daño les ha hecho.

Aunque el romance es el eje central de la historia, la autora habla de otros temas importantes, como la familia, el sentido de pertenencia, el abandono, la identidad, el rechazo social, la amistad o el sacrificio, entre otros.

En cuanto a los personajes, resulta fácil empatizar con Ellis y con su sufrimiento, aunque en ciertos momentos me ha sacado un poco de quicio esa actitud infantil, algo que es fácil de entender dadas las circunstancias y la edad de la protagonista. Por muy madura que sea, tiene 18 años, se siente herida y traicionada, y su actitud defensiva lo refleja perfectamente.

Aunque se aprecian los sentimientos de Easton durante toda la novela, me hubiera gustado conocer su perspectiva en algún capítulo y no solo a través de los ojos de Ellis.

La narración es fluida e intensa, pues son muchas las emociones que acompañan a esta historia.

En definitiva, si os apetece una lectura romántica y conmovedora, dadle una oportunidad a esta novela, seguro que os sorprende.

Mónica CZ