Intrusos. El misterio del lago

Opinión:

"Intrusos. El misterio del lago" es una novela gráfica escrita e ilustrada por Breena Bard.

En ella conocemos a los Ramos, una familia normal y corriente con tres hijos que suele pasar las vacaciones de verano en una cabaña en el lago. Este año podría ser el último, ya que puede que tengan que venderla debido a que el padre va a ser trasladado en el trabajo. Esta noticia no les sienta muy bien a sus hijos, especialmente a Gabi quien, a pesar de estar siempre pegada a un libro, le encanta ese lugar.

Los vecinos nuevos serán toda una sorpresa y, aunque al principio no se caen bien, no podrán evitar estrechar lazos, sobre todo cuando descubran una alucinante casa en medio del lago y un misterio en torno a ella. Sus dueños desaparecieron misteriosamente y no se ha vuelto a saber de ellos. Gabi, tomando como inspiración esta historia, se pondrá a escribir una novela de misterio; algo que empezará como simple ficción y que terminará con ellos colándose en la casa tratando de averiguar la verdad de lo sucedido.

La trama es bastante entretenida y tiene un poco de todo: amistad, aventuras, misterio, naturaleza, relaciones familiares complicadas… vamos, que es una lectura ideal para adolescentes que busquen una historia realista con un toque de intriga.

La ambientación está bastante lograda y capta la atención del lector, pues los niños se sentirán identificados con esos periodos de vacaciones en otros lugares, con las amistades espontáneas de verano y las aventuras en la naturaleza, además de un suculento misterio por resolver.

Las ilustraciones son sencillas, pero tienen los suficientes detalles para no perderse nada. El formato cómic hace que la lectura sea más fluida, por lo que es ideal para aquellos que quieran pasar un rato entretenido sin demasiado esfuerzo y para captar la atención de nuevos lectores.

En definitiva, "Intrusos. El misterio del lago" es una lectura amena que combina misterio, amistad, aventuras, naturaleza y dinámicas familiares diversas. Ideal como lectura de verano.

Mónica CZ