Entrevista a Agustín Sánchez Vidal por "Esclava de nadie"

Agustín Sánchez Vidal es Catedrático de Historia del Arte (Cine y otros medios audiovisuales) en la Universidad de Zaragoza, donde ha ejercido con anterioridad la docencia e investigación en Literatura Española. Ha sido profesor invitado en varias universidades americanas y europeas, como las de Princeton y Nanterre. Guionista de cine y televisión, ha colaborado con realizadores como Carlos Saura.

De sus más de cincuenta libros sobre literatura, arte y cine, cabe destacar Buñuel, Lorca, Dalí: el enigma sin fin, con el que obtuvo el Premio Espejo de España en 1988. En 2005 debutó en la novela con La llave maestra, editada en una docena de países, a la que siguió, en 2008, Nudo de sangre, galardonada con el Premio Primavera de Novela ese año.

La editorial Espasa-Calpe ha publicado este mes de febrero 2010 su último libro, "Esclava de nadie", la verdadera e increíble historia de Elen@ de Céspedes, hermafrodita juzgada en la época de la inquisición. Hablamos con el autor de tan interesante personaje de la Historia: nacida mujer, hija de esclava negra, se casó y fue madre; después fue hombre, soldado y cirujano de prestigio. ¿Quién era Elen@ de Céspedes?.

ENTREVISTA

Elena de Céspedes no es un personaje histórico perteneciente, como casi todos los biografiados, a la nobleza o al mundo del poder o militar ¿cuándo y cómo supiste de ella?

Fue allá a mediados de los años 1990, cuando trabajaba en la documentación de mi primera novela, La llave maestra. Necesitaba saber cómo se desarrollaba un proceso inquisitorial en Toledo en la década de 1580. Repasé los que había en el Archivo Histórico Nacional y este fue el que más me llamó la atención.

Es obvio por qué te interesó el personaje pero ¿fue fácil encontrar datos de ella aparte de los documentos por su juicio?

No resultó nada fácil. Prácticamente todos los datos proceden de los dos procesos en que se ve envuelto el personaje protagonista: el juicio civil del tribunal de Ocaña y el inquisitorial de Toledo. Hay algunas noticias posteriores que se refieren a su caso, y dan buena idea del impacto popular que alcanzó en su día. Pero son mucho más imprecisas que la documentación conservada, muy valiosa porque consiste en transcripciones literales de testimonios de primera mano.

Has debido rellenar lagunas sin embargo otras cosas habrán ocurrido y tenemos curiosidad: ¿su encuentro con el inca Garcilaso de la Vega fue real?

He tenido que rellenar muchísimas lagunas, aunque siempre procurando que no contradijeran los datos contrastados y que estuvieran avaladas por otros documentos de época. Por ejemplo, no hay constancia de que se encontrara con el Inca Garcilaso. Pero sí se sabe que este último participó en la guerra contra los moriscos por las mismas fechas que Elen@ de Céspedes. De modo que su encuentro es perfectamente verosímil.

Como personaje, como mujer, ¿qué te impresionó más de Elena?

Su coraje. El haberlo tenido todo en contra y, a pesar de ello, haber sido capaz de salir adelante. Y no por el camino que le marcaban, sino por el elegido libremente por ella, incluso a costa de pagar los más altos precios.

¿Y como hombre, como Eleno?

Su profesionalidad. Al parecer, era un cirujano excepcional. Las otras cualidades supuestamente "masculinas" -valor, fuerza bruta, competitividad, etc.- no me llaman tanto la atención.

Además de su historia también nos hablas de la de España. Me ha sorprendido leer las crueldades que los moriscos hacían a sus víctimas cristianas cuando en batalla o por secuestro ganaban ellos. Lo que narras es más salvaje que las torturas inquisitoriales... ¿están basados en hechos reales o hay parte de imaginación?

Las salvajadas de los moriscos contra los cristianos y de éstos contra aquellos son rigurosamente ciertas. Todas y cada una de las que aparecen en la novela están tomadas de alguno de los tres grandes relatos de la guerra de las Alpujarras: el de Mármol Carvajal, el de Ginés Pérez de Hita o el de Hurtado de Mendoza.

También fue una época, que tú mismo narras, donde convivían varias religiones ¿fueron los monfíes los fundamentalistas de entonces?

Parte de ellos, desde luego. Pero otros monfíes se acercaban más a los perfiles típicos del bandolerismo de las sierras andaluzas, casi endémico hasta el siglo XX. Es decir, que tampoco faltaba entre ellos gente desesperada que se había echado al monte porque los habían despojado de cualquier modo de subsistencia.

Describes la situación muy claramente: al final pagan justos por pecadores ¿cayeron en desgracia muchos moros inocentes por culpa de los fundamentalistas?

Eso está reflejado sin sombra de duda en las fuentes que he citado antes, y que no fueron neutrales, ya que los tres -Mármol Carvajal, Ginés Pérez de Hita y Hurtado de Mendoza- estaban de parte de los cristianos e incluso alguno participó en la guerra como intendente. Pero no sólo pagaron justos por pecadores. Es que había una decidida voluntad de extinguir la cultura y costumbres moriscas. Esa fue la causa de la rebelión de las Alpujarras, que procuró argumentos añadidos a los cristianos más radicales e integristas (que también los había).

Volvamos al personaje principal: Has planteado la vida de Elen@ como la historia de Sísifo ¿por qué?

Porque es la metáfora central de la novela picaresca de Mateo Alemán Guzmán de Alfarache, cuya vida viene a coincidir cronológicamente con la de Céspedes. Cada vez que Guzmán trata de salir a flote hay algo o alguien que lo empuja hacia abajo. Y también por el libro de Albert Camus, El mito de Sísifo, donde se viene a decir que Sísifo representa la decisión humana de elegir el propio destino incluso enfrentándose a los designios de los dioses o cualquier otra instancia ajena a la voluntad individual, libremente asumida.

Su hermafroditismo parece que sólo puede verificarse con la confesión oral de su mujer y su ex amante ¿cómo es posible que desapareciera todo rastro de su miembro viril?

La coartada de Céspedes ante el tribunal es verosímil y la mantuvo sin contradicción alguna: se le canceró o gangrenó el miembro y se lo fue cortando para atajar la progresión de la enfermedad. En circunstancias normales eso habría requerido testigos. Pero como Céspedes era cirujano, podía alegar que él mismo se hacía las curas.

¿Esto no la diferenciaría, además, de otros hermafroditas, convirtiéndolo quizás en un caso único?

Así es. No hay muchos casos tan documentados de hermafroditismo. Pero está, además, todo el trasfondo del personaje, que le presta un valor añadido: nacida esclava mulata, hija de esclava negra; criada en ambiente morisco; casada primero con un hombre y luego con una mujer; soldado en una guerra feroz; y el primer cirujano con sexo femenino de que se tiene noticia en la historia de la medicina, examinada y con dos títulos… Evidentemente, no es un caso habitual.

Elena tenía la regla y poseería esperma ¿podía tanto procrear hijos como tenerlos ella misma?

Consta que tenía la regla. Y, desde luego, que fue madre. Lo que ya no consta es que procreara como varón. Y en cuanto a que produjera esperma, ese testimonio sólo se sustenta en las afirmaciones del propio Céspedes, por lo que resulta dudoso.

Agustín, a partir del final -que no desvelaremos- a una se le quedan ganas de saber acerca de lo que pasó después con los personajes que pululan por la novela, especialmente su mujer, María del Caño. ¿No existe más documentación al respecto?

Tras la ejecución de la sentencia y las diligencias posteriores al proceso inquisitorial, se pierde todo rastro de Céspedes y María del Caño. No ha habido manera de conseguir otros testimonios. Hay alguna alusión en historiadores posteriores al hablar de la rareza de los casos de hermafroditismo, y citar a Elena como el más notable. Pero se trata de noticias de segunda mano que no añaden nada, e incluso introducen algunos errores.

Al final uno de los personajes dice que la historia de Elena(o) y María era una historia de amor ¿estás de acuerdo, son palabras tuyas más que del personaje?

Es una deducción mía que traslado al personaje del doctor Salinas, porque creo que la relación de Elena con María del Caño sólo se explica en esos términos. Que a Céspedes le gustaban las mujeres es más que evidente, porque tuvo relaciones con muchas. Pero dar el paso de casarse era tremendamente arriesgado, por todo el papeleo que llevaba, y las pruebas que había que aportar. Y, sin embargo, muy consciente de esos peligros, Elena arriesga su posición social (tan duramente conseguida) y su vida para unir su suerte a la de María. Otro tanto cabe decir de ésta, mucho más joven que Céspedes, quien le doblaba la edad.

Muchísimas gracias por contestar a esta entrevista y un abrazo.

Muchas gracias por brindarme la ocasión de hablar de todos estos detalles de la novela y del personaje. Casi todas estas preguntas fueron las mismas que yo me hice, y las razones que me llevaron a investigar la historia y a escribirla. Un abrazo.

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