Chicas de papel y de fuego

Opinión:

"Chicas de papel y de fuego" trata temas duros y, por tanto, hay escenas de violencia y abuso sexual, no excesivamente explícitas, pero que sí pueden impactar. Toda la situación por la que pasan las protagonistas es compleja y traumática, aunque se trata con mucho respecto y la protagonista se rebela contra la situación, sin aceptarla, y encuentra la fortaleza en situaciones adversas. Solo por eso merece la pena.

Por otro lado, es todo bastante lento y tiene partes que se hacen aburridas. Natasha Ngan se detiene demasiado en los detalles del entorno, lo que hace que la ambientación esté muy lograda, pero me da la sensación de que la relación entre las chicas no está lo suficientemente desarrollada. Es más, ni siquiera la relación entre Lei y Wren me ha parecido que lo estuviera, y eso que es una parte fundamental del libro. Vemos un romance a fuego lento, pero lo vemos de una forma superficial. Igual que los lazos que van surgiendo entre las Chicas de Papel. Incluso, a pesar de la narración en primera persona, y aun habiendo un cierto desarrollo del personaje, he sentido que me faltaba profundidad en la propia Lei en algunos aspectos.

Además, quizás por el aislamiento de Lei, las situaciones de conflicto del entorno apenas se tocan de refilón y son pocos los momentos de tensión que te mantienen en vilo, salvo en la última parte, en la que parece que todo se va acelerando un poco más. A pesar de ello, he encontrado muy prometedora esa última parte y el final, porque deja una situación de inicio bastante interesante para el siguiente, en el que probablemente se explore más en el mundo creado por la autora, por lo que no tardaré en leerlo.

En definitiva, es una historia con un mundo con potencial, personajes fuertes y situaciones duras pero bien tratadas que bien merece una oportunidad.

Déborah F. Muñoz