Presentación oficial de "Odio el rosa"

Crónica del encuentro de blogueros para la presentación de "Odio el rosa", proyecto transmedia de animación a la lectura para el siglo XXI publicado por Oxford University Press España.

Fecha y lugar del evento:

15 de mayo de 2014, 13h, Librería La Central, Mallorca, 263, Barcelona.

Para mí que la convocatoria fue realizada sobre la marcha por la sugerencia que hizo alguien. ¿Por qué digo esto? La recibimos el lunes de esa misma semana para vernos el jueves. Aun así, el material llegó el miércoles y pude echarle un vistazo al formato y un poco al texto.

Era la primera vez que entraba en la librería La Central, no es una zona habitual en mis recorridos por Barcelona, por lo que no conocía como está distribuida. Pensaba que el evento sería bien visible. Error. Desde la entrada hasta el fondo, todo el espacio estaba ocupado por estanterías repletas de libros. Un sitio perfecto para perderse toda una tarde, y alguna más también, pero no adecuado para una presentación.

Pregunté y nadie sabía nada. Allí cerca vi una escalera que llevaba a una planta superior. Subí, a primera vista estaba tan aprovechada como abajo. Hacia un extremo parecía haber un espacio abierto. El Café. Así es como se denomina, algo que he sabido mientras escribía el texto y buscaba información. Había llegado a la hora convenida: la una. El lugar estaba poco concurrido y no se apreciaba ningún grupo de gente.

Foto de los autores

Miré alrededor. Por fin descubrí algo familiar: un par de pilas de libros, como media docena cada una, sobre una mesa situada en una esquina de El Café. También vi a dos mujeres departiendo en animada charla. Me acerqué pensando que había llegado pronto y que aún faltarían más personas. Pues no, al final resultó que había sido el último. Éramos tres y nadie más.

Me presenté y ellas correspondieron: Pilar Lozano, editora sénior de Oxford University Press, y Anamari Granados, bloguera y locutora de radio.

Pues nada, ya estábamos todos dispuestos después de que nos trajeran unos refrescos, lo normal por el día algo caluroso y la temática juvenil del evento.

Como apenas habíamos podido echar más que un vistazo al par de libros que son la parte física de la propuesta, el encuentro se ciñó principalmente a la presentación por parte de Pilar del conjunto de aspectos que conforman ese proyecto educativo con una base literaria.

Empezó por los libros que ya conocíamos, presentando a sus personajes principales: Sara y Dani, cada uno con su historia particular que, como es de suponer, se entrecruzan en más de una ocasión.

Sobre el formato y el papel comentó Anamari que lo notaba como material de Instituto y que llamaba la atención; por mi parte que me parecía bastante pesado, tal vez demasiado para el público destinatario.

Hablamos sobre los coautores, Ana Alonso y Javier Pelegrín, que firman ambos cada uno de los libros, aunque Pilar aceptó, ante mi pregunta de si se repartían el trabajo o lo hacían todo a medias, que más bien Javier pone más las ideas y Ana la elaboración final de los textos (extremo que confirmé más tarde al comprobar que en los cuadernillos solamente figura ella como autora).

También mencionó al resto del equipo principal: Miguel Navia, ilustrador, y Felipe Samper, diseñador. Tal como nos presentaba el abasto del proyecto, seguro que detrás habrá más personas colaborando en diferentes aspectos.

A la vez que comentaba sobre los protagonistas de los libros, Pilar nos mostraba imágenes en su tablet de las páginas web que aparecían en sus historias, que también habían desarrollado para conseguir una apariencia más completa de ese mundo virtual.

En la imagen, el diseñador

Para que no se nos escapase ningún detalle, nos enseñó que al final de cada libro, dentro de la solapa de la contraportada se escondían unos objetos para despertar la curiosidad de los lectores: en el libro de Sara, una carta cuidadosamente doblada para mostrar una parte concreta del texto; en el libro de Dani, cuatro cartas de juego de rol ilustradas con personajes relacionados con la trama y con unas palabras escritas encima.

Continuamos y Pilar nos mostró unos cuadernillos, las guías didácticas, que presentan en su interior la totalidad de los elementos que componen lo que nos definió como "proyecto transmedia de animación a la lectura".

Si la parte literaria y lúdica ya se veía compleja con media docena de componentes accesorios, la estructura completa de los recursos didácticos demuestra que es un trabajo que la editorial se ha tomado el asunto muy en serio con esta propuesta que intenta acercar la literatura a los institutos de ESO.

Como prueba de eso, nos comentaba sobre el mantenimiento dinámico de los recursos web, que se irán actualizando para renovar los contenidos y mantener el interés de los participantes.

Imagen del ilustrador

Una cuestión que planteó Anamari era sobre la posibilidad de que se escogiese la historia del otro sexo en vez del propio, a lo que Pilar respondió que sería perfectamente natural, que no habría ningún problema, porque además los protagonistas se apartaban de los roles habituales que se esperarían de un chico o de una chica.

Llegando al final de la exposición, Pilar nos preguntó sobre nuestra impresión acerca del proyecto, ambos coincidíamos que era positiva y que podía ser interesante, a lo que insistió en que si íbamos a leer los libros. Anamari es más ducha en esto de las presentaciones y contestó con más entusiasmo que yo: sí que se los iba a leer, que lo haría encantada.

Por mi parte, acepté que los leería, que eso es lo que hago siempre, pero ya sé que se me notaba una cierta reserva, la que acostumbro a tener cuando me quieren vender algo y me insisten en que es fabuloso. Personalmente, prefiero comprobar por mí mismo que es lo que me ofrecen y valorarlo en su justa medida, que es lo que haría los días siguientes y cuyo resultado aparece en las reseñas (consultarlas pulsando sobre los nombres de los autores).

El tiempo había pasado y ya tocaba despedirse. Un poco antes había hecho una foto para ilustrar el encuentro, que es la que acompaña esta crónica.

+ Ana Alonso

+ Javier Pelegrín