Presentación de "Policía" de Jo Nesbo

Rueda de prensa para la presentación de "Policía", de Jo Nesbo. Jueves, 17 de marzo.

Sede de Penguin Random House Grupo Editorial, en Travesera de Gracia, 47-49, Barcelona.

Llegué puntual a la hora convenida y aun así me parece que fui el último en presentarse en el lugar.

La convocatoria incluía algo llamado "photocall", que al llegar descubrí que se trataba simplemente de que todos los interesados hiciesen fotos al autor, que posaba estático, primero en el pasillo interior, luego en la terraza.

Luego entramos en la salita que había preparada. Éramos una veintena larga de personas, nos tuvimos que colocar algo apretados y hasta unas cuantas en una fila suplementaria de sillas.

Después de unas cuantas novelas con el mismo personaje, el detective Harry Hole, esta es la décima, pocas sorpresas podía haber. Si acaso, algunos comentarios de Jo Nesbo que despertaron mi curiosidad.

Como, por ejemplo su actitud hacia los medios y los lectores. Puesto que tiende a trabajar aislado, cuando le empiezan a comentar sobre contenidos de su novela, es como si esa persona hubiese compartido aquel espacio con él, pero no ha sido así y es una sensación extraña.

También que fue en el tercer título de la serie cuando desarrolló por completo ese personaje. Incluso ya existiría un final, aunque como es lógico, se reservó cualquier detalle de cómo y cuándo sería.

Sin relación con esta entrega, sí con el personaje, apareció la mención de una próxima película donde será encarnado por Michael Fassbender, que será dirigida por Tomas Alfredson y está basada en la entrega "El muñeco de nieve".

Lo cierto es que, una vez se animó con la rueda de prensa, Jo Nesbo empezó a extenderse en sus respuestas de tal manera que la traductora tenía que resumir sus intervenciones en los conceptos principales para que no permaneciésemos allí dentro hasta más allá del mediodía.

Finalmente, cuando se dio por terminada la rueda de prensa, nos empezamos a incorporar de las sillas, maniobrando con cuidado dentro del escaso espacio disponible. No quedaba mucho más que hacer por allí y me dirigí hacia fuera de la salita.

Desde el principio había visto que escaseaban notablemente los ejemplares del libro, apenas cuatro o cinco contando los que estaban colocados en la presidencia de la mesa, así que esta vez me quedé con las ganas de llevarme un ejemplar de cortesía firmado por el autor.

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