Premios Planeta 2014 - 2. Comida, cena y fantasmas

LO QUE NADIE TE CONTARÁ DE LOS PREMIOS PLANETA 2014, página 2

 

De la comida siguiente os puedo contar esto: Iván nos abandonó para irse a otra mesa -este es un chico de negocios, no tiene remedio-, y Joaquín y yo nos sentamos en otra mesa que resultó amena. Fotografié alguna comida y postres para pasárselas por whatsapp a mi hijo (para darle envidia más que nada) así que os las enseño, pero para que sepáis qué comimos (modo cotilleo on) aquí va el menú:

 

 

 

¡Ah, no! Tengo una cosa mejor que la comida… Allí estaba también Óscar López, al que todos conocemos bien por "Página 2" de TVE, y fue nuestro primer reencuentro después de unos cuantos años en los que coincidimos en la feria del libro de Moncofa (y mira que cuando lo estábamos comentando no nos salía el nombre del pueblo!)

 

 

En la comida hice otras fotos pero ya a los personajes protagonistas del momento: la mesa del jurado.

 

Rosa Regàs es muy parlanchina. Siempre que la miraba estaba charlando. Aquí está con Pere Gimferrer.

 

Lo mismo puede decirse de este par de señores, y confieso que ambos me caen estupendamente. Juan Eslava Galán y Fernando Delgado.

 

A  Carmen Posadas le enseñé las fotos que le hice y le gustaron. Le dije que ella siempre salía bien, y muy orgullosa añadí que además yo era buena fotógrafa y tenía una buena cámara, jajaja.

 

 

Oye, la verdad es que no soy mala  fotógrafa. Viene de familia. Mi abuelo era fotógrafo y hacía reportajes. Y no soy la única de la familia que ha heredado este gusto por la fotografía.

Creedme que Carmen Posadas está siempre estupenda, elegante y perfecta al mediodía, por la noche y por las mañanas.

 

Estas son esas fotos que haces cuando te aburres porque estás en un impasse en el que no coincides con nadie o mientras sales a fumarte un cigarrillo…

 

Un cotilleo: España va bien... para algunos. Cuando llegué al hotel escuché al recepcionista contestar al telefóno y decir: "Lo siento, están todas la habitaciones ocupadas", y de allí no paraba de entrar y salir gente incluso con maletas. Unos se iban y otros venían.

Estrenaba esta preciosísima cámara:

 

Y me dediqué también a hacer pruebas de cámara en los momentos de aburrimiento (la verdad es que el flash saltaba siempre y tuve que tenerlo presente):

 

 

LA CENA

Así fue como hicimos -o al menos lo hice yo- tiempo hasta la noche, cuando nos iríamos a cenar al restaurante La Venta, en la Avenida del Tibidabo y desde donde hice estas fotos:

 

 

Aquí nos juntamos en la misma mesa el Trío Lobby:

 

Con mis compañeros de mesa:

 

De derecha a izquierda: Michel (Diario Vasco), Inés (Diario de Navarra), José Luis (periódico de La Rioja), Lola (periódico de Aragón), Gabi (Diario de Mallorca), Joaquín, Iván y a mí me podéis ver de pie atrás. Si me ponía en mi asiento, como era delante, no salía. (Gracias a Michel por echarme un cable con los nombres y los medios)

Con Alba Fité, que sufrió el momento "espejo". Me picaba la nariz y empezó a picarle a ella, jajajaja

 

 

La CENA fue para mí como todas: probé cositas y me dejé otras. Pero hubo un momento carcajada que para gente como yo (malpensada y risueña) fue hilarante. Nos dijeron que ahora venía "rabo de buey", y alguien (Iván creo) dijo que estaba mejor el "rabo de torero". Casi me atraganto de la risa, y cuando quiso aclarar que no era lo que pensaba dio la puntilla diciendo: "me refiero a corrida de torero", jajajaja ¡Me partía de risa!

Que quede claro que hablaba de rabo de toro "toreado", y que todo lo demás fue un lapsus tras otro.

 

Ya de vuelta al hotel, cada uno a lo suyo. Yo tenía mis lecturas:

 

Elegí el libro de Sol Blanco-Soler, "Casas encantadas, tesoros y niños perdidos", de Cúpula Enigmas. Clara Tahoces me dijo que un día que fuera a Madrid me presentaría a Sol y a Paloma Navarrete -estaba desando conocerlas-, y justo apenas uno o dos días antes me entero por ella misma que Clara estaría en la gala de los premios. Fue una alegría saberlo, pero aún me esperaba una sorpresa de la que tampoco ella tenía noticias.

Decidí empezar con el libro de Sol y enviar un tuit gracioso:

 

Y digo "gracioso" porque cuando salgo de casa, ya sea en hoteles o en casas de amigos siempre me pasa "algo" rarito (para mí a veces divertido y otras, no tanto). Y conforme envío el tuit empiezo a oír ruiditos en mi puerta. En MI puerta he dicho. No en la de al lado -porque no estaba ni cercana- ni en la de enfrente. Abrí los ojos como platos y me dije "hala, por hablar". Cesaron los ruiditos y menos de un minuto después escuché otra puerta, ésta cercana, y el sonido era totalmente distinto, lo que me demostraba que efectivamente había una diferencia y una claridad estupenda entre cuando hay un ruido en TU puerta y cuando es en otra. Por si acaso mirad el pasillo del hotel.

 

A la derecha, mi puerta abierta. Enfrente la que escuché más tarde, con un claro sonido de que venía de fuera (un sonido sordo, que se dice). A la izquierda de mi habitación no había nada más, era el final del pasillo, y la habitación que quedaba a la derecha estaba lejos, ni siquiera se aprecia desde la imagen. Lo que escuché era claramente en MI puerta. Y por eso digo que es gracioso, porque dije en el tuit "toca leer. En un hotel, sobre fantasmas. Emoción. Siempre pasa algo", y pasó, jajaja.

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