el cofre del alma

Opinión:

De nuevo la novela sueca negra  nos ofrece un excelente título que, estoy segura, deleitará a los amantes del género. En esta ocasión, Ann Rosman apoya su historia en el personaje de una mujer policía que se ve metida de lleno en una investigación compleja y con muchos cabos sueltos.
 
Si algo se puede criticar a la narración, es su final bastante previsible, aunque la autora lo conduce en todo momento con precisión. El ritmo es bueno y no decae aunque, como decía, los expertos en novela negra no tendrán demasiada dificultad en desentrañar la trama.
 
Como en las novelas de Camilla Läckberg, o de Asä  Larson, Rosman ambienta sus tramas en  la Suecia que más conoce, una Suecia salpicada de islas tranquilas donde veranear y, por lo visto, en las que pueden pasar las más inquietantes historias. 
 
Rosman se ha documentado a fondo sobre la historia medieval sueca; la persecución y quema de brujas mancillaron esas tierras tanto como otras que nos son más cercanas. Con ese pasado remoto y la historia verídica de un pequeño que en los años cincuenta fue obligado a vivir encerrado en un sótano, la autora crea una ficción que se sustenta en el potente personaje de Karin Adler, y de otros que, a mi parecer, pronto perderán su papel de secundarios para ganar protagonismo, como Johan.
 
En definitiva, El cofre del alma es una buena novela. Negra y sueca. Y digo yo, ¿qué tendrán esos suecos que se les da tan bien esto de la novela negra? 
  
Núria Pradas Andreu