la hija del pescador

Opinión:

Esta novela se inicia casi como una historia de misterio. Un hombre que ha perdido a su madre recibe una enigmática carta sin firmar que lo invita a viajar a un pueblecito escocés, donde su padre (al que siempre había creído muerto) está en peligro. La curiosidad natural ante esa información lleva al personaje hasta el lugar indicado, y allí descubre que su pasado no es en absoluto como había creído hasta ese momento.
 
Y ese pasado le llega al lector a través de un salto en el tiempo que la autora traslada a 1958. Un pueblecito costero, un joven popular enamorado de una linda muchacha, y un tercer joven, un chico marginado y con propensión a la violencia, que llega desde Glasgow con su familia para instalarse. Las relaciones que se crean entre ellos y la evolución de la historia son lo mejor de la novela. Cómo sus caminos van separándose y volviendo a converger para explicar la situación actual, a la que la autora regresa en el último tercio del libro.
 
Esa parte central es sin duda la más atractiva, con episodios dignos de mención, como las vivencias de uno de ellos a bordo de un buque mercante o como la estrategia del otro para lograr sus objetivos.
 
Toda la novela se rodea de cierto aire de ingenuidad, pero es agradable de leer. El misterio que envuelve las vidas de sus personajes va a mantenerse hasta el final, casi hasta la última página.
 
El ritmo es ágil y la lectura rápida. El estilo es sencillo, casi superficial, pero la historia engancha desde el principio y, a pesar de sus carencias en cuanto a profundidad o complejidad de personajes o argumento, es más que entretenida. 
 
Pilar Alonso Márquez