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Opinión:

Me cuesta calificar la novela de Mira Grant dentro del género de terror, aunque forme parte de una colección que se especializa en ese género. Y es que no me parece suficiente con echar mano de unos cuantos zombies para inscribirse con pleno derecho en ese género.

Esta novela, a mi parecer, es un thriller político que resultaría entretenido si la autora no se hubiera dejado llevar por un argumento repetitivo, denso por  los excesivos tecnicismos en que sustenta ese ambiente futuro en el que todo, el periodismo también, se basa en la informática y en una información en tiempo real. Tampoco me acaban de convencer los personajes protagonistas, esos dos hermanos a quienes nos cuesta seguir cuando la autora omite el nombre en los diálogos, pues acaban padeciendo una curiosa simbiosis.

Otros personajes, pongamos por ejemplo los padres de los hermanos Mason, son, simplemente, inconcebibles,  deshumanizados incluso en ese mundo que la autora pretende definir aunque, en realidad, deja perdido entre brumas. Y, por último, nos encontramos ante los personajes típicos y tópicos, como el candidato a la presidencia de los EEUU, o el gobernador malo malísimo, que de tan malo se ve venir de lejos.

No desvelaré aquí el final de la novela por respeto a los futuros lectores, pero sí que diré que le sobran claramente los capítulos finales que acaban de cargarse definitivamente ese aire heroico que la autora persigue inútilmente.

No creo, pues, que Feed pueda contentar a los amantes del terror, ni a los seguidores de la ciencia ficción. De hecho, Feed es de esa clase de novelas en las que uno anda esperando que pase algo que no acaba de pasar nunca. Y no porque la novela carezca de acción, sino porque esa acción no es creíble y no se justifica en ningún caso. 
 
Núria Pradas