¡No soy una croqueta! No puedo gustarle a todo el mundo

Opinión:

Marta Prada creadora del conocido blog de educación y crianza @Pequefelicidad acumula más de 47 millones de seguidores en redes sociales. En 2017 ganó el premio al mejor blog de la blogosfera gracias a su guía sobre metodología Montessori y educación respetuosa. Gracias a sus formaciones, tanto presenciales como online, acerca a familias y educadores a su filosofía educativa.

"¡No soy una croqueta! No puedo gustarle a todo el mundo" es una cautivadora historia que transmite un mensaje profundo con un estilo respetuoso y visualmente encantador que destaca la autenticidad y la verdadera amistad.

Con un lenguaje sencillo, accesible, fluido y una letra de imprenta, la historia nos presenta una realidad; el ingreso de los niños al mundo social y la interacción con sus pares. En un mundo donde la presión por encajar puede surgir desde edades tempranas, el libro ayuda a los pequeños a comprender que la autoaceptación y la autenticidad son clave para establecer relaciones sanas y significativas.

La autora aporta un enfoque profundamente educativo al utilizar los principios de la pedagogía Montessori, la disciplina positiva y el humor para transmitir mensajes que refuercen valores esenciales como la empatía, el respeto y la confianza en uno mismo.

Las ilustraciones de Mercè Tous, talentosa y conocida artista con un bagaje amplio en el mundo editorial, presentan un estilo cálido y detallado, dando vida a los personajes y su entorno de una manera entrañable y expresiva. Los colores vibrantes y las composiciones dinámicas crean un mundo visual que complementa y enriquece el mensaje del libro.

Además, la sensibilidad artística de Tous permite que los niños se identifiquen fácilmente con los personajes, capturando momentos de alegría, duda y autodescubrimiento de una manera que emociona y educa a partes iguales.

A lo largo del relato son múltiples los valores y temáticas a tratar; la familia, la amistad, la autoestima, la autenticidad, las relaciones sanas, el autoconcepto, la valentía, la aceptación personal, el respeto, la individualidad y la resiliencia.

En conclusión, "¡No soy una croqueta! No puedo gustarle a todo el mundo" es una herramienta poderosa para las familias y los educadores que buscan fomentar en los niños una autoestima sólida y relaciones interpersonales basadas en el respeto mutuo. Un recordatorio de que la autenticidad es la clave para formar conexiones genuinas y para vivir una vida plena y feliz.

Una lectura imprescindible para cualquier biblioteca infantil que valore la educación emocional y la crianza desde el corazón.

*Publicado por Carambuco Ediciones.

Marisa Costa