Una vez en la vida

Opinión:

Nunca había leído nada de Gilles Legardinier, pero desde este momento lo tendré muy presente. He conectado fácilmente con sus personajes, con su brillante humor absurdo y con su historia.

"Una vez en la vida" no es una novela que arranque carcajadas, pero sí roba grandes sonrisas y, sobre todo, rebosa optimismo y esperanza por todas sus páginas. Transmite tan buen rollo que la he ido dosificando, un poco cada día, porque no quería que terminase.

"Una vez en la vida" nos adentra en el corazón de una compañía teatral que no pasa por su mejor momento. Allí conoceremos a muchos personajes, como Éugenie, una mujer de 60 años que tiene todo para ser feliz; buenos hijos y bien educados, un marido que la adora y el trabajo de sus sueños -ser la guardiana del teatro-, pero siente que no es suficiente y un sentimiento de vacío inmenso, la persigue. Víctor, su esposo, también trabaja en el teatro. Es un hombre muy vital y cómico -para mí, uno de los mejores personajes- y ayuda a todos en lo que puede.

También tienen un especial protagonismo Juliette, la coreógrafa, la más joven de las tres amigas. Es una cabra loca del amor, que busca divertirse pero que, tras conocer casualmente a un guapo mecánico, se enamora perdidamente de él. Su historia de amor es genial.

Por último, conocemos a Céline, la costurera. Tiene unos cuarenta años, un niño de 12 años, un empleo en una compañía de seguros y preocupaciones de dinero, ya que su ex no paga la manutención de su hijo. También es la amante de un hombre casado, pero puede que se esté cansando de esa relación y por fin haga algo para solucionar su vida...

Junto a las protagonistas, están el resto de personajes: Maximilien, Nicolas, Olivier, Arnaud, Natacha, Laura… hasta Norbert, un muñeco articulado que dará mucho juego. Todos estos personajes tienen una importancia vital en la novela y en la vida del teatro.

Legardinier es todo un dramaturgo de la vida cotidiana; sabe cómo conseguir escenas tremendamente emotivas cuando es necesario y otras increíblemente divertidas.

Con ese estilo narrativo tan fresco, logra crear personajes auténticos y cercanos -de los que cuesta despedirse- y hacer que el lector se sienta uno más de esa peculiar familia teatral.

En definitiva, "Una vez en la vida" es una lectura muy entretenida, divertida y conmovedora, que transmite grandes dosis de optimismo, entusiasmo y ganas de vivir. Es una novela para disfrutar.

Mónica CZ