En la oscuridad
Título: En la oscuridad
Título Original: (In the Dark, 1992)
Autores: Ed y Lorraine Warren, Al Snedeker, Ray Garton, Carmen Reed
Editorial:
Obelisco
Colección: Estudios y Documentos
Copyright:
© 1992, Ed y Lorraine Warren, Ray Garton, Carmen Reed y Al Snedeker
© Ediciones Obelisco, S.L., 2020
Traducción: Daniel AldeaEdición: 1ª Edición: Septiembre 2020
ISBN: 9788491116325
Tapa: Blanda
Etiquetas: alcohol adolescencia expedientes x basada en hechos reales violencia ciencias ocultas esoterismo demonología películas más allá fantasmas espíritus paranormal exorcismo endemoniados fenómenos paranormales sobrenatural literatura estadounidense parapsicología posesiones demonios terror miedo horror testimonios crónica cáncer biográfica casas encantadas violaciones visiones poltergeist trastornos del comportamiento Connecticut necrofilia iglesia católica exorcistas investigadores paranormales amenazas sacerdotes clarividencia entes oscuros maldad seres de bajas frecuencias agresiones fantasmales ensayo novelado íncubos entes malignos acoso espectral infestación endemoniadas sangre los Warren olores raps (golpes) películas de terror voces funeraria Familia Snedeker
Nº de páginas: 340
Argumento:
La familia Snedeker decide mudarse en Connecticut a una casa más cercana al hospital porque uno de sus hijos mayores (todavía un adolescente) está en tratamiento de un cáncer bastante agresivo. Alquilan una casa que todavía está en obras y antes fue una funeraria.
Lo que hay más allá de los pasillos del sótano donde dormirá el joven enfermo (Stephen) solo puede llamarse MALDAD OSCURA E INFERNAL, en mayúsculas, porque hará todo lo posible por atacarles, poseerles y convertir su vida en un infierno.
Opinión:
Es una pena que los títulos de los libros de esta serie no lleven el nombre que te evoque directamente a la historia que o bien conoces algo, o has oído hablar, porque ni por asomo hubiera imaginado que "En la oscuridad" era la historia de los Snedeker, la familia que se instaló a vivir en una antigua funeraria buscando la cercanía de un hospital por su hijo, enfermo de cáncer.
O sea, estamos hablando de una de mis películas favoritas de terror, "Exorcismo en Connecticut" con Virginia Madsen haciendo de Carmen (la madre), y ni por asomo hubiera caído… Al respecto tengo varias cosas que decir, por cierto, porque creo que tanto película como libro lo merecen.
Para empezar "Exorcismo en Connecticut" está basado (yo diría que más bien inspirado) en hechos reales, pero no es del todo fiel a la historia… El matrimonio conoce de sobra que van a alquilar lo que fue una funeraria (en la peli, no, al menos el hombre se asombra de lo que descubre cuando en realidad el verdadero Al conoció el sótano completo ANTES que su hijo lo viera) y además lo que realmente les alquilan es un primer piso o planta baja, hay otro piso arriba (apartamento, indican, página 39) que el dueño alquilaba a otras personas (aunque todavía no estuvieran viviendo ahí cuando los Snedeker tomaron la decisión de alquilar la casa porque estaban en obras-) que contaba con ático o desván. La casa -antes funeraria- es enorme, mientras que la casa de la peli es grande pero familiar, con mucho menos espacio. En la película el cineasta centra toda la atención en una sola casa típica americana de dos pisos, desván y sótano, y un solo matrimonio, sin vecinos, para no desviar la atención. Por ese lado decir que creo que hizo muy bien porque encima los aisló. Los Snedeker tenían vecinos. La familia de la película también, pero no tan cercanos.
A todo esto en la peli Stephen elige el sótano como habitación, mientras que en el libro es Carmen quien le dice que el sótano será su habitación (y de Michael cuando vuelva de unas vacaciones, un hermano que eliminan directamente en la película) y él desde el primer momento le dice que no le gusta, que hay algo maligno ahí y pasa mucho tiempo durmiendo en un sofá arriba. La de cosas que te enteras que no tienen nada que ver con la peli es uno de los mayores atractivos de este libro.
Carmen tiene sus dos primeros hijos (Stephen -el enfermo de cáncer-, y Michael) de un matrimonio anterior, y los dos pequeños (Peter y Stephanie) los tiene con Al Snedeker. Aunque parezca una tontería contar esto, para quienes buscaban similitudes con la película son detalles que cuentan porque se supone que en el libro cuenta lo que realmente pasó, por lo tanto sabremos qué inventó el director de cine (o qué omitió explicar) y qué no. Dos sobrinas de Carmen (Mary y Laura) van a pasar un tiempo con ellos, pero de las dos solo una decide quedarse, Laura, la mayor. Tanto ella como Carmen fueron las más perjudicadas y acojonadas sin lugar a dudas, así que no puedo más que pensar que Laura tenía un par de ovarios porque tal y como se cuentan/explican/detallan los ataques hacia su persona no son, precisamente, para quedarse. Laura dijo que no quería dejar sola a Carmen. Sororidad, por cierto, porque el marido de Carmen prefería tragar cervezas y cabrearse. Esta relación con Al y el alcohol sí que salen.
Por cierto, en la película los nombres los cambian: Carmen/Sara, Stephen/Matt, Al/Peter, Peter/Billy, Laura/Wendy… solo conservan el nombre de Mary, sin embargo sí se especifica que está basada en hechos reales. De paso eliminan a Michael, el hermano de Stephen, y convierten a Peter y Mary en los dos únicos niños de la casa, por lo cual se cargan también a Stephanie.
En la película ambas sobrinas están incluidas en el pack desde el inicio, así son más personajes ¿Dónde está Michael? Incluyen a Mary como si fuera una de las pequeñas y al niño pequeño como si fuera el único hijo de Al y Carmen cuando tienen un niño y una niña.
Algunas de las cosas que vive Carmen en la película las vive Stephen, o sea que van cambiando detalles a conveniencia. Aun así la película es maravillosa, es de las que más horror producen, de las mejores bajo mi punto de vista.
Me resultó muy, pero que muy llamativo, la figura de Stephen, el protagonista de la película, el jovencito enfermo de cáncer prácticamente con un pie en la tumba, cosa que ocasiona, tal vez, que por eso viera más que los demás (como le decía el cura que también estaba muy mayor). El por qué es fácil: en la vida real, en este libro donde entendemos que nos cuentan lo que de verdad pasó, a Stephen no le creían y le reñían constantemente, lo constreñían, apartaban y reñían (a pesar de su enfermedad), resumiendo: los padres fueron crueles con él en muchas ocasiones y el joven acabó cambiando su actitud al tiempo que el cáncer remitía. Aquí se convierte en un adolescente que escucha heavy metal y utiliza detalles en ropa que la madre considera sacrílega. Los Snedeker eran religiosos, pero llegaron a denunciarlo y a hospitalizarlo para que le diagnosticaran alguna enfermedad mental. Eso, a pesar de que ya estaban empezando a vivir momentos horripilantes, cada uno por su cuenta. Claro, después de eso Stephen YA NO APARECE en la historia y todo lo horrible que sucede les pasa a los demás, como él advirtió, y eso me parece muy interesante porque entonces la esquizofrenia deberían repartírsela un poquito para cada uno (sarcasmo). No me extraña, por ello, que cuando finalice la historia y pasen los meses Stephen aún no quiera saber nada de volver con sus padres.
Si nos vamos a la película, aun sabiendo cuantísimo se aparte el cineasta y el guionista de la realidad, hay que agradecerles que se centraran en Stephen y nos permitieran pasar miedo en lo que tenía que ser una película de terror como dios manda: terrorífica e impactante. Tampoco cuentan exactamente lo que sucede en la casa y no sé deciros qué es peor, lo que ocurrió allí o lo que mostraron en la película (que no aparece en ningún momento en el libro)… Escalofriantes ambas cosas.
Volviendo a la película, lo que hacen es basarse en rumores que recorrieron la zona acerca de que los propietarios de la funeraria hacían ritos satánicos, de ahí que el terror y las escenas horrorosas que se ven del pasado tengan más que ver con eso, que con lo que los Snedeker cuentan. Puede haber similitudes pero en la peli (spoiler) se dedican a grabar sus cuerpos y a mutilar cierta parte de su anatomía, mientras que en la vida real los Snedeker hablan de ataques personales contra ellos y visiones terroríficas que los mantienen en vilo y gastan sus energías, incluyendo quedar como poseídos en algún momento dado, o idos, viviendo al mismo tiempo cosas terribles. Al cura enfermo de cáncer, por ejemplo, en la peli le pide ayuda el propio (Matt) Stephen mientras que en la vida real es Carmen quien pide ayuda al sacerdote. El trato de Carmen con el cura es tan opuesto al libro que te quedas en shock. Luego dices "eh, que por algo es una de tus pelis favoritas, no importan los cambios" et voilà.
Los Warren, a pesar de ser los investigadores del caso, aparecen casi al final, y de hecho es parte de su equipo (de hecho dos son familiares) quienes se quedan día y noche y presencian o sufren con la familia Snedeker cada ataque terrorífico que se sucedió durante todo ese tiempo, demasiado largo cuando estás esperando que exorcicen una casa porque el Vaticano no es muy dado a dar el visto bueno a estas cosas. Los investigadores son Chris McKenna, el nieto de los Warren; John Zaffis, el sobrino de los Warren, y Sal Valenti, todos miembros de la Sociedad de Investigación Psíquica de Nueva Inglaterra, la organización fundada por Ed y Lorraine Warren. En la película los Warren ni aparecen, le dejan el trabajo de exorcizar la casa al cura que conoce el chico en el hospital durante el tratamiento del cáncer. Sea como sea al director y a los guionistas solo puedo aplaudirles por muchas diferencias que haya entre film y libro.
"En la oscuridad", aunque está contada en tercera persona y de forma muy aséptica, está escrita por los Warren y Ray Garton y, se sobreentiende que por el matrimonio formado por Al y Carmen. No parecen buscar drama ni terror fácil, y eso es lo más tremendo de todo, que cuando te cuentan lo que pasa es terrorífico solo pensar que pueda pasarte a ti. ¡A ti! No, qué va, es una locura. Había momentos en que me acordaba de la película "El ente" y me sobrepasaba, porque aquí los ataques espectrales llegan a las violaciones al más puro estilo "El ente" (aquella peli que protagonizó Barbara Hersey y que también estaba basada en hechos reales). En cuanto al estilo narrativo hay cierta frialdad, ya os digo, y también pienso que se repiten en ocasiones demasiado. Sospecho que esto es porque el matrimonio insistía mucho en contar cada momento vivido en la casa y eso hacía que leyeras muchas veces algunos pensamientos o certezas, o incluso la palabra "maligno". Así pues no estamos ante una novela de pluma elegante o zalamera, sino ante una especie de crónica novelada asépticamente que, a pesar de eso, puede llegar a aterrorizar. La película es mucho más emotiva.
En la realidad, o al menos en el libro que dice contar la verdad -incluso cuando los padres quedan mal- si al inicio sufres por el pobre Stephen, un crío enfermo de cáncer al que nadie cree -o nadie quiere creer-, al final solo puedes horrorizarte con los acontecimientos porque son tan bestias, tan brutales, que te dejan sin aliento. Lo cierto es que la peli da mucho miedo, el libro no, pero las cosas que ocurren SÍ son terroríficas.
Una grandísima oportunidad de conocer la verdad del horror que vivió la familia Snedeker porque las cosas que cuentan son mucho más fuertes que lo que pasa en la película "Exorcismo en Connecticut".
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Comentario de los lectores:
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