Reencuentro y Un Alma Valerosa

Opinión:

"Reencuentro y Un alma valerosa", de Fred Uhlman, es la suma de dos hermosos relatos sobre la amistad y la ruptura, que describen la emoción de la complicidad a pesar de las artificiales distancias sociales propias de la época en la que transcurre la historia, pero también del desapego resultante de los extraños caprichos del destino y las convenciones sociales en una sociedad tan rígidamente jerarquizada como era la Alemania de los años 30 del pasado siglo. Un relato que pone el acento en la belleza más que en la fealdad de unos años grises, tristes, cargados de odio y violencia. Ajustando cuentas a la estupidez y soberbia de individuos cuyo único mérito era la cuna en la que nacieron, pero, sobre todo, reivindicando la belleza latente en un libro, en una partitura, en una colección de monedas cuya antigüedad podía transportar a remotas épocas de sabios y héroes, en la propia juventud que vive intensamente cuando rehuye convenciones o niega rancias costumbres sin sentido.

Uhlman no necesita excederse para seducir con su prosa precisa, austera, sin artificiales e innecesarios adornos que sólo empeorarían la calidad del relato. Se ha escrito mucho, ríos de tinta, sobre el ascenso del nazismo, sobre la locura colectiva de una nación que se desempeñó en un frenético genocidio, pero este libro trasciende una mera crónica de aquellos turbulentos acontecimientos, ofreciendo una perfecta tragedia servida en una brillante prosa.

Es fácil dejarse llevar por sus páginas, regalarse con el decurso de escenas y lugares que el autor entrega con calculada economía para que el lector avive con gozo su propia imaginación. Como es dable entregarse sin resistencia al dolor que describe con sutileza, con elegancia, con la profundidad de la herida que se abre en dos almas gemelas a las que sólo les separan las circunstancias de una sociedad rota, quebrada a pesar de sus salones, glamurosos conciertos, rigurosas convenciones sociales y las preventivas distancias personales propias de un orden en decadencia.

El libro de Uhlman, a pesar de su brevedad, es rico en evocación, es inspirador, revelador de cómo una enfermedad social puede envenenar a un pueblo culto y antiguo para ahogarlo en un terrible baño de sangre y dolor. Una amistad rota como síntesis perfecta del desencuentro entre un pueblo condenado a la muerte o el exilio por su fe, y una decadente aristocracia dividida entre el amor desaforado a un enloquecido plebeyo que le hipnotiza o le provoca un intenso desprecio sólo moderado por una sumisa aceptación.

Una amistad y una trágica ruptura que necesitan del relato para encontrar una razón que ayude a comprender, para dibujar un contexto que ayude a ubicar, para concentrar en pocas páginas la historia de millones de personas condenadas a la época que les tocó fatalmente vivir, y todo eso en un magnífico libro para suerte de los lectores que se acerquen a esta obra. Uhlman escribió un libro esencialmente bello y a la vez trágico, ofreciendo una historia, como pudieron ser otras tantas en aquellos turbulentos tiempos, para goce y pavor del lector de todos los tiempos.

Un gran libro muy bien traducido, con una cuidada y precisa prosa en español. Una obra con sobrados méritos para ser publicado en la prestigiosa colección Andanzas de la editorial Tusquets, que ha tenido un gran acierto al publicar juntos estos dos relatos a pesar del tiempo que les separa en su escritura.

Jorge Riet