Querido Atticus

Opinión:

Querido Atticus es una novela de crecimiento, en la que vemos cómo su protagonista se debate entre el seguir siendo una niña y el convertirse en una adulta sin referencias válidas por la falta de su madre (ausente en un psiquiátrico por intentar matarla y haber matado a su gemelo) y por tener un padre alcohólico que llora aún lo ocurrido con su mujer. ¿A quién puede preguntar sus dudas al ir convirtiéndose en mujer? Pues de momento, a una vecina que la cuida durante el verano.

Aunque aparentemente es un libro muy sencillo, que nos cuenta la vida de Sarah durante el verano en el que cumple doce años, tiene un trasfondo mucho más duro de lo que podemos esperar a priori. Sin nadie a su alrededor que la ayude a resolver sus dudas, vuelca su inquietud hacia seres inanimados, su planta Planta, sus diarios y las cartas a Atticus Finch, ya que igualmente no van a responderla, pero por lo menos se siente escuchada.

Me ha gustado mucho cómo a partir de una voz infantil, la autora nos propone el dilema de cómo sobreviven aquellos que pasan por una gran tragedia (la muerte del gemelo y el intento de asesinato de Sarah), gente normal que de repente se ven en el ojo del huracán mediático y que allá donde vayan terminan siendo reconocidos como "la familia de la madre asesina", ¿cómo lidiar con el sufrimiento de la pérdida y la agonía de no poder vivir tranquilos? ¿Cómo afronta cada uno ese peso?

Al final, a fuerza de luchar y pedir lo que ella considera que es justo en su vida, conseguirá que los adultos que tiene a su alrededor por fin se den cuenta de que ella es tan consciente como ellos de las circunstancias que rodean su vida, y que exige y demanda no solo respuestas, sino el derecho a tener una vida normal de una vez por todas.

Un libro realista, que nos hará sonreír y llevarnos las manos a la cabeza por igual cuando leamos la vida de esta inteligente niña que lucha por tener una vida normal contra viento y marea.

Elena Martínez Blanco