Postales del Este

Opinión:

Reyes Monforte vuelve al género histórico con "Postales del Este", centrándose en la segunda guerra mundial, en concreto en la vida en el tristemente famoso campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau en Polonia.

La protagonista de la novela es Ella, una joven judía francesa que, gracias a su dominio de varios idiomas y su excelente caligrafía, consigue sobrevivir en el campo como copista en la orquesta de mujeres, la primera y única orquesta en un campo de concentración en todo el territorio del Tercer Reich.

La autora ha demostrado anteriormente su dominio del género histórico con su mejor novela hasta el momento: "La pasión rusa". En "Postales del Este" regresa al género histórico creando una historia en al que combina personajes reales y ficticios.

El peso de la novela recae sobre sus dos protagonistas, dos mujeres antagónicas, víctima y verdugo: la prisionera Ella y la jefa de campo, María Mandel, que existió realmente y fue conocida como "la bestia de Auschwitz". Ambos personajes no pueden ser más opuestos, Ella, dulce, inocente y bondadosa y María Mandel, la mujer más cruel y sanguinaria que podamos imaginar, entusiasta ayudante del siniestro doctor Mengele.

Reyes Monforte se ha documentado en profundidad para escribir la historia, construyendo un retrato preciso de la vida en un campo de concentración, sin pasar por alto los detalles más duros de las condiciones de vida de las prisioneras. Un relato muy crudo, profundamente estremecedor por lo realista, en el que la única nota positiva y esperanzadora viene dada por la música y las palabras. La música siempre presente, una de las prisioneras del campo es la violinista Alma Rosé, sobrina de Gustav Mahler, directora de la orquesta del campo; y las palabras que serán la tabla de salvación de la protagonista así como el instrumento utilizado por ella para lograr que no se olvide a todos aquéllos que sufrieron los horrores del campo.

Un buen libro, aunque demasiado largo a mi entender y, aunque en el fondo contiene un mensaje optimista, es muy triste.

Celsa