Mil años de manga

Opinión:

"Mil años de manga" es un ensayo profusamente ilustrado y con ánimo enciclopédico de Brigitte Koyama-Richard, que es profesora de Humanidades en la Universidad Musashi y es autora de varios libros sobre el arte en Japón.

Un detalle importante del libro, que destaca la autora desde la página de agradecimientos, que está situada antes del índice, donde vuelve a repetirlo, es que en todos los casos ha mencionado los nombres japoneses en su orden tradicional, que coloca el apellido antes del nombre.

El volumen ha sido editado por Blume en un amplio formato de 22 x 26,5 cm en un papel grueso de tacto fotográfico, que reproduce con fidelidad las ilustraciones, lo que se pone de manifiesto en algunas donde una lupa resulta muy adecuada para ver algunos detalles muy pequeños.

Esto ocurre porque hay ilustraciones que reproducen rollos o tiras, con unas imágenes que ocupan el espacio del ancho de la página y que aún así se aprecian diminutas, de manera que es necesario recurrir a un accesorio para contemplarla en toda su magnitud.

También se percibirá, aunque no sea a primera vista, el sistema que ha utilizado la autora para concentrar los textos de cada capítulo en unas páginas, con pocas o ninguna ilustración en ellas, colocando la mayoría después o en páginas propias. Se trata de que ha puesto los números de las ilustraciones (ojo, no de la página) junto al texto donde se mencionan, pero en el margen interior y en un tamaño menor que las letras, de manera que se tendrá que abrir más el libro para descubrir las cifras, aparte de achicar la mirada o recurrir a la lupa otra vez.

Dejando esos detalles, que sólo es cuestión de adaptarse, lo que sí se descubre pronto es que la autora hace un recorrido exhaustivo por todas esas manifestaciones artísticas que han sido la base del manga actual hasta llegar a la actualidad, situando cada etapa en su contexto y mostrando en las ilustraciones sus características más importantes.

Hacia el final, tras ese amplísimo recorrido, Brigitte Koyama-Richard recoge varias entrevistas que ha realizado a artistas del manga, siendo la primera con Matsumoto Leiji y Maki Miyako, para continuar con Taniguchi Jirõ. En el siguiente capítulo, "Del manga a otras formas artísticas", están las entrevistas a Takahata Isao, Kõno Fumiyo y Shiriagari Kotobuki.

Finaliza el libro con varios anexos, como un glosario bastante extenso, una referencia cronológica a los periodos y eras en que se divide la historia de Japón, un listado comentado de mangakas anteriores a nuestra época, una cronología de hechos relevantes relacionados con el manga, sobre todo del siglo XX, y, para acabar, una bibliografía que recoge títulos tanto occidentales como en japonés.

Tal como lo veo, "Mil años de manga" es un libro imprescindible para las personas interesadas en el manga y sus orígenes, pues considero que se trata de una muy importante obra de referencia.

Selin