Los animales de climas fríos

Opinión:

"Los animales de climas fríos" es un libro de aprendizaje para niños a partir de 2 años, escrito por Pascale Hédelin e ilustrado por Julie Mercier.

El formato que SM ha realizado para este libro no podría haber sido mejor para el uso y manejo por parte de los niños pequeños. Es en tapa dura y los bordes, tanto de la cubierta, contracubierta y de las páginas, están redondeados para que los niños no se hagan daño con ellos. Además, las páginas vienen con un tacto suave, brillante y las páginas son maleables, se doblan con facilidad, para que no les cueste pasarlas ni queden rígidas y se puedan hacer daño.

Lo primero que va a llamar la atención de los niños es el color, de un amarillo muy llamativo. Además, la ilustración del pingüino viene en un plano diferente al título y, al tener un plástico por encima, da sensación de profundidad y relieve. El cambio de material, del cartón al plástico, sirve para que los niños palpen y desarrollen el sentido del tacto.

Me ha gustado mucho la estructura de "Los animales de climas fríos", en la que encontraremos tres etapas de aprendizaje para los niños: nombro, comprendo y aprendo.

En la primera, "nombro", que viene reflejada con un círculo azul, los niños aprenderán un vocabulario amplio sobre los animales que viven en climas fríos, como los lobeznos o la foca; el entorno que les rodea, como el iceberg, el nido o los abetos; y partes de su cuerpo, como las pezuñas, las garras o las aletas. Cada palabra viene escrita al lado de la ilustración correspondiente, para que el niño pueda identificar qué es cada cosa.

Con "comprendo", reflejada con un cuadrado verde, los niños aprenderán diferentes características de los animales que previamente han visto en "nombro", por ejemplo, que la foca no respira bajo el agua o que la cola espesa del zorro ártico lo abriga cuando duerme. En esta ocasión, cada frase explicativa viene debajo de una ilustración que representa lo que el niño está leyendo, a la foca nadando bajo el mar o al zorro ártico durmiendo hecho un ovillo para resguardarse del frío.

La última etapa, "aprendo", viene diferenciada por un triángulo rojo, y en ella los niños tienen diferentes actividades. La primera es nombrar y señalar cada imagen que se corresponde con la palabra de las tres que incluyen. La segunda parte, y para mí la que más me ha gustado, los niños pondrán a prueba su memoria y verán si recuerdan lo que acaban de leer. Se les plantea una serie de preguntas, por ejemplo, "¿Quién tiene una cola espesa?", y se les da tres ilustraciones con sus tres nombres escritos debajo, el oso blanco, el lemming o el zorro ártico, de tal manera que el niño tendrá que seleccionar la correcta. La solución a cada pregunta está escrita también debajo, aunque en un tamaño de letra más pequeño.

En "Los animales de climas fríos" los niños encontrarán diferentes escenarios y conocerán a los animales que los habitan y su entorno. Cada escenario se divide a su vez en las etapas de "nombro", "comprendo" y "aprendo". Estos escenarios son "En la llanura helada", "Sobre el hielo", "En el mar de aguas frías", y "En la montaña".

Además, hay más títulos de la misma colección, para que si este ha gustado a los niños, continúen aprendiendo sobre "Los animales de la granja", "Los vehículos", "Los animales marinos", "Mi día" y "Insectos, arañas y otros animales".

En resumen, "Los animales de climas fríos" es un libro con el que los niños se van a divertir observando a los animales a la vez que conocen nuevas palabras, comprenden lo leído y desarrollan su capacidad para retener lo leído.

Vane Gómez