Los amantes anónimos

Opinión:

Lo primero que me ha llamado la atención en esta novela son los aspectos contradictorios, según me ha parecido a mí, de la estructura narrativa, que por una parte es meticulosa al marcar el paso del tiempo y por otra intercambia sin ninguna solución de continuidad de un escenario a otro.

Es decir, primero, en cada inicio de capítulo aparece muy claro la fecha y la hora exacta en que se desarrolla la acción; luego, no hay la más mínima separación entre los diferentes escenarios, así que tras un punto y seguido, de pronto cambia el lugar y los personajes implicados.

Vale que a veces son los compañeros de Carmen que prosiguen la investigación con ella al otro lado del pinganillo, pero otras no tiene nada que ver una cosa con la otra y el estilo es el mismo.

Si, al menos, hubiese una resolución del caso, que esa es mi expectativa ante una novela policíaca, eso sería como una excentricidad de la novela, pero tal como he proseguido con mi lectura, al final me he sentido defraudado. Incluso he llegado a pensar si me habría despistado en algún momento clave, que todo podría ser.

En detalle y según he visto: por una parte hay lo que parece un personaje (podrían ser varios) que chatea con la inspectora y nunca he visto identificado. También hay un asesino (por lo menos) y aunque se intuya un sospechoso más claro que otros, la narración se interrumpe sin que haya respuesta a ese interrogante. Algún personaje que desaparece durante la trama, al final sigue totalmente desaparecido, ¿era importante o un adorno?

En resumen, en mi opinión a esta novela le falta, al menos, un capítulo o dos más para cerrar la historia y no dejarla, como ahora, como si fuese el episodio de una serie de televisión que solucionará, o no, los interrogantes planteados en el siguiente.

Que puede ser que para otros lectores todo quede perfectamente claro, pero en mi caso no ha sido así.

Selin