Los abrazos lentos

Opinión:

"Los abrazos lentos" es el nuevo libro de Elísabet Benavent y está ilustrado por Laura Agustí.

Elísabet Benavent ha querido regalarnos esta pequeña parte de sus memorias. "Los abrazos lentos" no es una biografía al uso, es más especial, más significativa, simplemente mucho más. Ya en el prólogo, la propia autora nos anticipa qué vamos a encontrar. Una recopilación de sus escritos, sus palabras, que ha ido realizando a lo largo de varios años. Elísabet Benavent se ha vaciado en "Los abrazos lentos".

Lo primero que me gustaría destacar es la edición por parte de Suma de Letras. En tapa dura y con un diseño sencillo y elegante gracias a la ilustración y colores usados. Además, "Los abrazos lentos" está bellamente ilustrado.

Laura Agustí tiene un estilo muy característico. Sus ilustraciones son delicadas, de trazos sencillos pero llenas de detalles. Crean una armonía muy bonita con los textos de Elísabet Benavent. Las encontramos de color negro sobre fondo blanco, pero también contiene tres ilustraciones que son en color blanco sobre fondo negro.

"Los abrazos lentos" contiene 312 escritos, cada uno de ellos correctamente numerado. Esto es un detalle importante, ya que al final del libro encontraremos un índice con dicha numeración y el título de cada escrito. Esto puede facilitar si queremos localizar alguno en concreto, o para poder marcar aquellos que más nos hayan gustado por algún motivo.

No se puede definir de una manera sencilla lo que vamos a encontrar en "Los abrazos lentos". Es un conjunto de ideas, pensamientos, sentimientos, sensaciones, reflexiones sobre la vida. Seguramente con más de una el lector se pueda sentir identificado, ya que hacen referencia al día a día, a situaciones cotidianas.

Cada uno de ellos contiene un mensaje directo, la autora no se ha andado por las ramas y me sorprende su capacidad para, en unas pocas palabras, expresar tanto, ya que algunos, como el 84, es tan solo una frase, o como el 146, compuesto por dos frases. Otros son más largos, pero aun así, no son textos muy extensos, por lo que se leen en un ratito de nada.

Se podría decir que "Los abrazos lentos" está orientado al público femenino, pero desde mi punto de vista, es una lectura que tendrían que realizar también los hombres. Algunos escritos, como el número 4, "Carta breve a un desconocido", es revelador y una lectura que todos los novios, maridos, amantes o amigos deberían de hacer. A mí me ha marcado especialmente.

Sus textos están impregnados de amor, esperanza, sueños, deseo e ilusión. Textos para aprender a valorar lo que se tiene, el entorno, para aprender a valorarnos a nosotras mismas, para valorar la vida. Textos para enseñar que no tenemos que ser perfectas, que somos imperfectas pero que lo importante es que seamos felices. Pero en ellos también encontraremos tristeza, dolor, soledad, complejos. Cartas a su niña de la infancia, a una madre, a una ciudad que la ha adoptado, a su ciudad, a sus gatos... Es Elísabet Benavent sin trampa ni cartón.

Por último, me gustaría recomendar que "Los abrazos lentos" no se lea del tirón. Es un libro para disfrutar poco a poco. Para leer diez minutos antes de dormir y pararse a pensar sobre lo que hemos leído, comentarlo con nuestra pareja, familiar o amigos, para coger un día de la estantería sin motivo, abrirlo al azar y leer lo que el destino nos haya seleccionado. "Los abrazos lentos" es de esos libros que pueden estar tiempo y tiempo en manos de los lectores.

Vane Gómez