Lilí. La Justiciera Enmascarada 1. Sola ante el peligro

Opinión:

"Lilí, la Justiciera Enmascarada. Sola ante el peligro" es la primera historia de una trilogía enfocada a niños a partir de unos diez años de edad. El autor del texto es Santiago García-Clairac, publicista, desarrollador de cortometrajes, videoclips y anuncios publicitarios, además de profesor de publicidad. También escribe literatura infantil y juvenil, siendo autor de varias series y novelas. Las ilustraciones van a cargo de Laia Ferraté, ilustradora de literatura infantil y juvenil.

Liliana, de once años, es una niña a la que le apasionan las películas del Oeste, y esto es porque desde que era pequeñita ha vivido en un rancho en el desierto de Almería. Sus padres eran los encargados de proporcionar los caballos a los sets de rodaje cuando se hacían los wésterns en Almería. Cuando en el mundo del cine, éste género de películas tuvo menos audiencia, empezaron a rodarse en Hollywood y los padres de Liliana tuvieron que reinventar su negocio, así es que cuidan del rancho que construyeron. En él tienen caballos, y Libertad es la yegua favorita de Liliana.

Por ser una chica diferente, con gustos distintos a los demás niños de su colegio, se ve acosada por tres chicos, sobre todo por uno en concreto, un abusón al que Liliana le tiene verdadero pánico. No hay momento del día en el que pase en el colegio que no viva con el miedo a encontrarse con Macario, el chico que la acosa.

Con este planteamiento, Santiago García-Clairac ha creado un cuento que es divertido y a la vez duro y aleccionador para los niños que puedan estar sufriendo bullying en cualquier parte y no se sientan preparados para contárselo a nadie, ni siquiera a sus padres.

A la vez, el autor pretende hacer un homenaje a los grandes wésterns, siendo cada título de la colección parecido al de tres grandes películas: "Sola ante el peligro", "Las siete magníficas" y "La buena, la fea y la mala". En este caso, la protagonista es una chica, algo diferente a lo clásico y más divertido. Con esta primera entrega, Santiago García-Clairac acerca al público infantil la esencia de lo que es un wéstern, así que intercala entre la realidad de Liliana con sus problemas de acoso en el colegio y los económicos que tiene su propia familia y la desbordante imaginación de Liliana que vive en paralelo siendo la Justiciera Enmascarada, que dicho sea de paso, es una heroína que odia la violencia. Para que los niños sepan diferenciar estas dos historias que se cuentan (aunque las dos están relacionadas entre sí) la editorial ha puesto las páginas de distinto color.

Con la historia que vive Liliana, los niños van a darse cuenta que los abusos hacia ellos, si algún día los sufren, es mejor contarlos a un adulto y no esperar ni un solo día más. Liliana ve las injusticias que se cometen hacia personas buenas por parte de adultos con poder, sobre todo económico. Y que hasta los adultos pueden sufrir acoso por parte de otros para conseguir lo que quieren, y lo mejor es poner freno a esta situación, no dejándose manipular ni un segundo más.

A pesar del trasfondo de la historia, me ha parecido una lectura que puede ser también muy divertida para los niños, creándose situaciones que van a hacerles reír. Sobre todo, con Liliana convertida en la Justiciera Enmascarada. Quién sabe si con este pequeño homenaje del autor, de este cuento salen posibles futuros fans del wéstern, tanto de películas o series como de novelas, algo que está por desgracia en decadencia en los últimos tiempos.

Las ilustraciones por parte de Laia Ferraté son bonitas, amables, muy coloridas y los rasgos de los personajes muy realistas.

En resumen, "Lilí, la Justiciera Enmascarada. Sola ante el peligro" es un divertido cuento que hace homenaje a los wésterns, con un trasfondo con el que se intenta denunciar el bullying.

María Criado.